El PNV prepara un texto alternativo a la ley de Armonización pactada por UCD y PSOE

El Grupo Parlamentario Nacionalistas Vascos, paralelamente a las negociaciones que se desarrollarán -en su segunda fase- la próxima semana, en Madrid, entre el Gobierno central y el Gobierno vasco, presentará al Congreso de los Diputados un proyecto alternativo a la actual ley Orgánica de Armonización del Proceso Autonómico (LOAPA).

El portavoz del Ejecutivo autónomo, Ramón Labayen, hizo mención -en el curso de una conferencia de Prensa celebrada en Vitoria- a la necesidad de elaborar un «texto alternativo a la LOAPA» en caso de que ésta, con su actual redacción, sea aprobada en su día por las Cortes Generales. De los tres frentes de discrepancia que existen entre las dos Administraciones, a raíz de la firma de los pactos autonómicos entre UCD y PSOE -los acuerdos político-administrativos, el Fondo de Compensación Interterritorial y la LOAPA-, es acaso este último el que más preocupa al Gobierno vasco por haber iniciado ya los trámites parlamentarios correspondientes y porque, a su juicio, en él no se descarta la posibilidad de que se pueda aplicar en las comunidades autónomas constituidas.El diálogo iniciado oficialmente entre el Gobierno central y el Gobierno vasco el pasado día 8, para examinar conjuntamente las repercusiones de los pactos autonómicos firmados el pasado mes de julio, continuará la próxima semana en su segunda fase, ya que en el primer contacto tan sólo se pudo abordar una parte de las objeciones que el Ejecutivo vasco exponía a la LOAPA. Mario Fernández, Pedro Luis Uriarte y Marcos Vizcaya insistirán de nuevo en pedir a la Administración central garantías, reconocidas oficialmente y por escrito, de que los artículos de la Ley Orgánica de Armonización del Proceso Autonómico no vulnerarán los estatutos en vigor.

Por su parte, el Grupo Parlamentario Nacionalistas Vascos está elaborando un proyecto de ley, según pudo saber ayer EL PAIS, alternativo a la LOAPA y que -en su opinión- sigue a pies juntillas la letra y el espíritu del Estatuto de Guernica, así como de la ley de conciertos. Tal proyecto -que supone la transformación en artículos de las objeciones expuestas por el Gobierno vasco a mediados del pasado mes de agosto (véase EL PAIS de 10 de septiembre)- será remitido a las Cortes en el caso de que la LOAPA no fuera modificada o no contemplase una cláusula que descarte la posibilidad de aplicación en las comunidades autónomas ya configuradas.

Precisamente el tema de los acuerdos autonómicos fue el plato fuerte del almuerzo que celebraron ayer en Vitoria el presidente de la UCD vasca, Jesús María Viana, y el presidente del Consejo Nacional del Partido Nacionalista Vasco, Xabier Arzallus. Tras la reunión, ambos políticos reconocieron a los medios informativos sus discrepancias en torno a los pactos firmados por UCD y PSOE el pasado mes de julio.

Mientras Arzallus insistía en la necesidad de disponer de una garantía formal por parte del Gobierno de que los acuerdos autonómicos no se aplicarán en las comunidades que ya disponen de estatuto propio -«con la simple inclusión de un articulo en la firma de los pactos solucionábamos el tema»-, el presidente de la UCD vasca declaraba: «Tanto el ministro Martín Villa como el presidente Calvo Sotelo me han dado absolutas garantías de que los acuerdos no vulneran el Estatuto. Es quizá comprensible la demanda de los Nacionalistas Vascos, porque la LOAPA es una ley para todo el Estado, pero creo que no es necesaria una clarificación por escrito. Es más, una inclusión de ese tipo de articulado comportaría unas enormes y graves consecuencias en el resto del Estado».

Sin embargo, Xabier Arzallus no ocultaba el resquemor nacionalista en el caso de que las mencionadas garantías no queden plasmadas en un papel, y exigía ayer a UCD el compromiso de que la LOAPA, con su actual redacción, no se aplicará en las comunidades autónomas ya configuradas.