Las tarifas del Metro subirán antes de fin de mes

El Consejo de Intervención del Metro acordó ayer solicitar a la Comisión Provincial de Precios una reestructuración de tarifas, consistente en la creación de un bono-metro, la desaparición del billete de ida y vuelta y la aparición de un billete disuasorio que valdrá para todos los días de la semana. El precio de este bono-metro será de doscientas pesetas, en tanto que el billete disuasorio costará, si así lo aprueba la Comisión de Precios, veinticinco pesetas. Por otra parte, las tarifas de la Empresa Municipal de Transportes (EMT) no experimentarán ninguna subida durante este mes, en contra de los rumores habidos en los últimos días.

La remodelación de tarifas solicitada perjudicará principalmente a un 15% de los viajeros del metro que, en la actualidad, utiliza billetes de ida y vuelta, ya que, frente a las quince pesetas que ahora paga por viaje, tendrá que abonar veinte pesetas. El viajero normal, por su parte, no pagará más, aunque tendrá que comprar los billetes de diez en diez. Por último, aquellos que no deseen utilizar el sistema de bonos se verán obligados a pagar veinticinco pesetas.La petición de subir las tarifas es la segunda de las que se realizan este año, ya que el pasado mes de abril el billete normal subió de quince a veinte pesetas. La decisión de si suben o no dependerá ahora de la Comisión Provincial de Precios y del gobernador civil, Mariano Nicolás, que será quien fije la fecha de entrada en vigor.

Con respecto a la subida de las tarifas de la EMT, en los últimos días han corrido rumores de que iban a aumentar; esta serie de informaciones ha coincidido con la falta de bonos-bus en diversas sucursales de la Caja de Ahorros y Monte de Piedad, lo que trajo consigo el aumento de las colas ante las casetas de la empresa en donde se pueden comprar estas tarjetas.

"El Consejo de Administración de la EMT no me ha autorizado en ningún momento a iniciar los trámites para pedir una subida de tarifas, por lo que esos rumores son falsos", manifestó ayer Jose Luis Montemayor, director de la EMT.

El aumento, que no se llevará a cabo seguraniente hasta el próximo mes de octubre, podría consistir en una subida de treinta o cuarenta pesetas en el bono-bus, que pasaría de costar 160 pesetas a 190 o 200 pesetas, en tanto que el billete disuasorio costaría veintiocho o veintinueve pesetas.