Presunta carga de armas en un avión jordano en el aeropuerto de Valladolid
, Un cuatrimotor de fabricación soviética Iliushin, burdamente pintado con los distintivos de la compañía jordana de aviación civil Alta, ha sido detectado sobre las pistas de la base aérea-militar de Villanubla, donde fue cargado con el contenido de dos misteriosos camiones-trailer que previamente habían llegado a la base. Ni el coronel Carrillo, jefe del aeropuerto militar de Villanubla, ni el Cuartel General del Aire, en Madrid, han querido hacer comentario alguno ni responder siquiera a las preguntas de este corresponsal sobre la verdadera nacionalidad del avión y el contenido del transporte.
Viajes similares a éste han venido produciéndose con cierta frecuencia. La última vez, hace unos tres meses, los pilotos del misterioso avión vestían uniforme militar, sin que se haya podido averiguar si eran del Ejército jordano o de algún otro país árabe. En anteriores ocasiones, el cargamento recogido en Villanubla estaba rotulado con anagramas de Unión Española de Explosivos, por lo que no es difícil colegir que se tratara de municiones. España es uno de los países que fabrican y venden armamento a terceros. Lo que no se puede saber es si el disfraz del avión oculta tan sólo a un avión militar de Jordania, país amigo y que se encuentra en paz, o esconde la identidad de un transporte militar de algún otro país no tan pacífico en cuya flota sea más normal la presencia de un aparato de fabricación soviética. El mutismo de las autoridades del Aire, lamentablemente, contribuirá a que los rumores proliferen a partir de estos datos comprobados.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.