Condenas de un año para varios dirigentes socialistas marroquíes
Los dirigentes de la Central Democrática dé Trabajadores (CDT) y de la Unión Socialista (USFP) de Rabat juzgados por los incidentes del pasado 20 de junio fueron condenados el jueves a un año de prisión firme, según el veredicto dado a conocer por el tribunal.Al término de la audiencia, todos los condenados gritaron conjuntamente eslóganes patrióticos y reiteraron a voces su determinación a seguir luchando, mientras sus abogados defensores reafirmaban que el juicio era político y estaba dirigido contra la CDT y la USFP.
De 82 acusados en total en la capital del reino, los veintiún miembros de la dirección de la central sindical socialista y de dicho partido han sido condenados a penas relativamente superiores a las aplicadas en la ciudad de Casablanca hasta ahora.
El único condenado a una pena diferente fue el ex decano del Colegio de Abogados de Rabat y actual secretario general de la USFP en la capital, Abderramán Benameur, sobre quien ha recaído una condena de tres años, aunque con sentencia en suspenso.
El colectivo de abogados que aseguró su defensa, más de un centenar, acudidos de todo Marruecos, rechazó en bloque todas las acusaciones formuladas contra el ex decano basándose en numerosos testimonios concordantes que negaban la participación de Benameur en las huelgas.En cuanto al proceso de los máximos dirigentes de la CDT que se lleva a cabo en Casablanca, éste sigue en curso después de que la defensa pidiera un complemento de información y señalara irregularidades en las actas policiales.
Al parecer, el Ministerio de Justicia envió a los jueces que actúan en los procesos de la citada ciudad una circular relativa a las penas impuestas hasta ahora, que el Ministerio considera mínimas, e incluso se cree que un juez fue suspendido por este motivo.
En cualquier caso, y en varias ciudades de Marruecos, además de Casablanca, los fiscales del reino han recurrido contra las sentencias y obtenido que éstas sean duplicadas o triplicadas.
Dos hipótesis han sido formuladas sobre el sentido y alcance de esta serie de juicios y condenas. La primera fue expresada el 27 de julio por el presidente del grupo parlamentario socialista, Radi, durante la sesión de clausura de la Cámara de Representantes. Para Radi, el poder quiere "obligar a volver a las catacumbas" a una oposición socialista cuyo reforzamiento teme en un clima de grave deterioro social.
Por haber intentado publicar estas acusaciones, el diario comunista Al Bayane, reautorizado desde el 15 de julio, fue nuevamente prohibido el 29, pero volvió a salir el 30.
La segunda hipótesis, que algunos califican de cínica, sostiene que, con la represión, el poder intenta obligar a la USFP a permanecer en el Parlamento. Los socialistas decidieron retirarse del Parlamento en la próxima sesión de octubre.
De confirmarse esta hipótesis, se iniciaría en otoño una negociación entre el poder y la oposición socialista cuyos militantes podrían ser liberados rápidamente a cambio de su reincorporación al Parlamento. Ambas partes desmienten, por ahora, esta eventualidad.
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