El Rey entrega sus despachos a los 135 nuevos oficiales de la Armada

El rey Juan Carlos presidió a mediodía de ayer la jura de bandera de los 72 guardiamarinas de primer curso y la entrega de despachos a 135 nuevos oficiales de la Armada, en la Escuela Naval Militar de Marín (Pontevedra). Con uniforme de verano de capitán general de la Armada, don Juan Carlos desembarcó del yate Azor, donde había pernoctado, momentos antes de las once de la mañana, y tras los honores y salvas de ordenanza se dirigió al sitial, instalado en la plaza de armas del centro castrense.

La presidencia militar del acto estuvo formada por el ministro de Defensa, el almirante jefe del Estado Mayor de la Armada, Luis Arévalo Pelluz; el capitán general de la Zona Marítima del Cantábrico, el capitán general de la VIII Región Militar, el comandante general de la Infantería de Marina, el comandante general de la Flota, director de Enseñanza Naval y otros mandos. El presidente de la Xunta, el gobernador de Pontevedra, el rector de la Universidad de Santiago, parlamentarios y otras autoridades compusieron la representación civil en el acto.El arzobispo vicario general castrense, Emilio Benavent, ofició la misa y aludió en su homilía a la festividad de la Virgen del Carmen, patrona de la Armada.

A continuación, entre aplausos del público asistente, según subraya la agencia Efe, tuvo lugar la jura de bandera de 72 alumnos aspirantes, que se reparten entre la 3851 promoción del Cuerpo General. la 115ª promoción de Infantería de Marina y la 60ª promoción de Intendencia. Luego siguió la entrega de los reales despachos a los 135 nuevos oficiales de la Armada, promovidos a alféreces de navío los del Cuerpo General, y a tenientes los de Infantería de Marina, Máquinas, Intendencia, Sanidad, Jurídico e Intervención.

Don Juan Carlos impuso la Cruz del Mérito Naval a los números uno en cada uno de los cuerpos y escalas, y también a un teniente de Infantería de Marina y a su hermano, «por su ejemplar comportamiento al evitar un ultraje a la bandera», según señala la agencia Europa Press. Por último, tuvo lugar la entrega de premios de las marinas de guerra de Argentina, Brasil, México, Chile, Portugal, Perú y Uruguay, que llevaron a cabo los respectivos agregados navales, y tras el desfile, un almuerzo con asistencia del Rey y autoridades. A las 16.30 horas, Su Majestad regresó a Madrid desde el aeropuerto de Labacolla, en Santiago, a bordo de un Mystére de la Fuerza Aérea, acompañado por el ministro y el almirante jefe del Estado Mayor de la Armada.