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A mediodía

de hoy, el historiador y economista Ramón Carande Thovar, de 94 años de edad, recibirá la primera medalla de oro de la provincia de Sevilla, otorgada por la Diputación, que ha querido premiar así su gran labor investigadora y su humanismo liberal sin tacha, escribe José Aguilar. El solemne acto tendrá lugar en el salón del Almirante de los Reales Alcázares.Trabajador incansable, increíble conversador y demócrata a carta cabal, Carande -don Ramón en los círculos intelectuales sevillanos- nació en Palencia el 4 de mayo de 1887, y se caracterizó desde su juventud como hombre ligado a la Institución Libre de Enseñanza, y amigo personal de Giner de los Ríos. Llegó a Sevilla en 1918, haciéndose cargo de la cátedra de Economía y Hacienda de la Universidad Hispalense.

Sus investigaciones más conocidas dieron origen a los libros Sevilla, fortaleza y mercado y Carlos V y sus banqueros. Es doctor honoris causa por las universidades de Lille y Colonia, y ha sido invitado a dar cursos en otras universidades europeas, entre ellas las de Oxford y Berlín, tanto que ha sido marginado durante mucho tiempo de la vida académica española.

En efecto, dadas sus vinculaciones con la II República (Azaña llegó a ofrecerle un ministerio y fue miembro de la Agrupación al Servicio de la República), el régimen surgido de la guerra civil le declaró culpable y sufrió diversas represalias, tras solicitar su reingreso en la cátedra de Sevilla y siendo el único concursante al traslado, los trámites se suspendieron durante seis años. Incluso en 1975, el ministro de Educación y Ciencia vetó por motivos reglamentarios su nombramiento como doctor honoris causa de la Universidad Complutense, siendo finalmente investido dos años más tarde. Está en posesión de la medalla de oro al Trabajo.

Durante los últimos años del franquismo, Ramón Carande fue también el símbolo de la resistencia cívica y punto de referencia obligado para todos los demócratas sevillanos, encabezando numerosas iniciativas de protesta por malos tratos a detenidos políticos y, en general, defendiendo la aplicación de los derechos humanos.

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