CATALUÑA

Confusión en torno a las manifestaciones en honor del patrón de Cataluña

Barcelona - 22 abr 1981 - 00:00CEST

El Gobierno Civil de Barcelona advirtió anoche públicamente sobre la ilegalidad de las manifestaciones convocadas en Barcelona para hoy y mañana, coincidiendo con la celebración de la festividad de San Jorge, patrón de Cataluña. El comunicado del Gobierno Civil fue recibido con evidentes muestras de sorpresa y desconcierte por parte de los organizadores de los actos, algunos de los cuales señalaron que en su ánimo estaba el celebrar las manifestaciones a pesar de la citada advertencia.

Anoche se habían establecido negociaciones entre estos últimos, el gobernador civil y el delegado del Gobierno en Cataluña, Josep Meliá, para tratar de encontrar una salida a la situación planteada.En un comunicado hecho público, el Gobierno Civil señalaba: «Deliberadamente se ha infringido, por los organizadores, lo dispuesto en la Constitución y los plazos de comunicación contenidos en la normativa legal vigente para estos casos. En consecuencia, hay que entender que se trata de una provocación manifiesta a las leyes, que incurre en la ilegalidad».

La primera de las manifestaciones está convocada para esta tarde frente al edificio del Parlamento catalán, en el parque de la Ciudadela. El objetivo era entregar al presidente de la Cámara legislativa catalana los pliegos con las 150.000 firmas recogidas en apoyo de «una televisión y una radio catalanas». La manifestación debía trasladarse luego a la plaza de San Jaime, donde una comisión sería recibida por el presidente de la Generalidad y el consejero de Cultura del Gobierno autónomo. La convocatoria del acto y la recogida de firmas ha sido organizada por los Grupos de Ayuda a la Lengua Catalana (Gallca), entidad de carácter cívico carente de significación política.

La manifestación de mañana de alcance más amplio, ha sido convocada para las ocho de la tarde en la plaza de Cataluña. El lema de la concentración es Som una nació («Somos una nación»» cuenta con el apoyo de las organizaciones en Barcelona de los partidos parlamentarios Convergencia Democrática de Cataluña, Izquierda Republicana de Cataluña y PSUC (socialistas y centristas no apoyan la convocatoria).

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Los organizadores entienden que la prohibición es parte de una "campaña anticatalana"

Viene de primera páginaTambién dan soporte al acto las Comisiones Obreras catalanas, la Liga Comunista Revolucionaria, el Movimiento Comunista y la coalición Nacionalistes d'Esquerra. La convocatoria oficial corre a cargo de la Comisión de Defensa de la Lengua, la Cultura y la Nación Catalanas.

Han sido distribuidos por Barcelona 50.000 carteles, 120.000 tiras y 200.000 pegatinas con el lema «Som una nació» y convocando al acto. La concentración estaba previsto que consistiera única y exclusivamente en la lectura de un manifiesto suscrito por entidades y personalidades catalanas en defensa de la lengua, cultura y nación catalanas y en el canto del himno Els Segadors. Fuentes próximas a los organizadores manifestaron anoche que entendían la postura del Gobierno Civil de Barcelona como un hecho que confirmaba la existencia de una campaña anticatalana y que, a su vez, podía influir en que el acto no tuviera el carácter de celebración pacífica previsto.

Anoche se estaban realizando gestiones ante el delegado del Gobierno en Cataluña y el consejero de Gobernación de la Generalidad por parte de una comisión de las entidades organizadoras, con el fin de conseguir que los actos puedan celebrarse.

Como consecuencia de que no se ha llegado a un acuerdo unitario por parte de las fuerzas políticas parlamentarias para la celebración de la Diada de Sant Jordi, el PSUC ha decidido adherirse a la concentración que se celebrará en la plaza de Cataluña.

En un comunicado hecho público ayer por el partido se indica, entre otras cosas, que,«ante la campaña antiautonomista emprendida por el Gobierno de UCD, el PSUC llama a todos sus militantes y simpatizantes a que acudan a la concentración para apoyar la autonomía y la democracia».

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