Inhumados en San Sebastián los restos del teniente retirado de Infanteña y del director de la empresa Moulinex

Los restos mortales del teniente de Infantería retirado Oswaldo José Rodríguez y del director de la fábrica de Moulinex España en Usúrbil (Guipúzcoa), José María Latiegui, asesinados ambos el martes, fueron inhumados ayer en el cementerio de Polloe, en San Sebastián. El atentado terrorista que costó la vida a Latiegui, como adelantó ayer EL PAIS, fue reivindicado por los Comandos Autónomos Anticapitalistas. A última hora de la tarde de ayer ninguna organización se había responsabilizado aún de la autoría de los asesinatos del teniente coronel de la Guardia Civi Luis Cadarso, en Basauri (Vizcaya), y del teniente Oswaldo Joé Rodríguez, ambos retirados.Con anterioridad al sepelio del teniente Rodríguez se celebró en el Gobierno Civil de la provincia, donde se encontraba instalada la capilla ardiente, una misa corpore insepulto. La ceremonia dio comienzo a las diez, y a ella asistieron el capitán general de la VI Región Militar, con sede en Burgos, teniente general Luis Polanco Mejorada; los gobernadores civil y militar, el comandante de Marina de la plaza y el alcalde de la ciudad, el nacionalista Jesús María Alkain, entre otras personalidades civiles y militares. Finalizado el oficio religioso, el féretro que contenía los restos mortales del militar asesinado fue trasladado al cementerio de Polloe, donde el cadáver de Oswaldo José Rodríguez recibió sepultura. El cortejo fúnebre discurrió acompañado de una escolta militar.

A mediodía se celebró en la parroquia del Sagrado Corazón del barrio de Loyola, donde residía el teniente Rodríguez, un funeral, al que asistió numeroso público.

A las 19.30 horas tuvo lugar en la parroquia de Gurutziaga, en el barrio donostiarra de Ayete, el funeral por el alma de José María Latiegui. El templo parroquial se llenó de público, y un numeroso grupo de personas hubieron de seguir la ceremonia desde el exterior. El cadáver de Latiegui fue inhumado, también en Polloe, en la intimidad familiar.

En relación con el asesinato del director de la fábrica Moulinex de Usúrbil, que ayer permaneció cerrada en señal de duelo, en medios políticos se interpreta que la organización que se ha reconocido autora del hecho, los Comandos Autónomos Anticapitalistas pretende presionar a Francia, país donde se encuentra la casa matriz de la multinacional Moulinex, frente a los inminentes procesos de extradición contra presuntos militantes del grupo citado y de ETA Militar. detenidos a mediados de febrero y encarcelados desde entonces en Bayona (Francia). Moulinex España, SA, por su parte, facilitó ayer un comunicado de repulsa por el asesinato y de admiración y respeto por la personalidad de la víctima.