Un guardia civil retirado, herido de gravedad en Pamplona al estallar una bomba en su automóvil

El guardia civil retirado Teodoro Jaca Goya resultó herido de gravedad en la mañana de ayer, en Pamplona, al explosionar un artefacto colocado debajo de su vehículo, que contenía cerca de un kilo de Goma 2 y metralla. Teodoro Jaca, que fue operado por espacio de tres horas, ha perdido la pierna derecha, si bien no peligra su vida. La Diputación Foral de Navarra tomó ayer el acuerdo de condenar el atentado y mostrar su solidaridad con los familiares del ex miembro de la Benemérita.

Sobre las 7.30 horas de ayer, Teodoro Jaca, de 56 años, casado y con tres hijos, natural de Peralta (Navarra), salió de su domicilio en el barrio de la Rochapea, para dirigirse en su coche hasta el ambulatorio de la Seguridad Social del barrio de la Chantrea, en donde trabaja como ordenanza, ya que se había jubilado de forma anticipada como guardia civil en 1975. Después de montarse en su vehículo, un Renault 6 de color rojo, matrícula NA-5.591-B, que se encontraba aparcado en la calle Errotazar, junto al garaje Orhy, accionó el contacto e introdujo una velocidad. Cuando la rueda delantera derecha dio la primera vuelta, explotó un artefacto de pinza situado debajo del Renault 6, que destruyó el coche y produjo graves heridas a Teodoro Jaca.La explosión fue oída por su mujer e hijos, que acudieron al lugar del atentado, avisando posteriormente a la Policía Nacional. A mediodía, junto a una gran mancha de aceite y restos de sangre, se encontraba en el lugar del atentado uno de los zapatos de Teodoro Jaca. El herido fue trasladado minutos después de la explosión del artefacto hasta el servicio de urgencias del Hospital de Navarra. Después de una intervención quirúrgica que se prolongó por espacio de tres horas, la dirección del Hospital de Navarra facilitó un parte médico sobre el estado de salud del ex guardia civil, en el que se indica: «Herida por metralla que afecta a la pierna derecha, con pérdida de musculatura y lesión arterial a la altura del hueco bobliteo que obliga a una amputación supracondílea de pierna derecha. Fractura con minuta del calcáreo izquierdo. Pronóstico grave».

Después de producirse el atentado, fuerzas de la Policía Nacional establecieron controles en las carreteras de acceso a Pamplona, así como en el interior de la. capital navarra, mientras un helicóptero de la Guardia Civil sobrevolaba continuamente la ciudad. La Diputación Foral de Navarra, que conoció el atentado cuando se encontraba reunida en una sesión ordinaria, acordó condenar el atentado y expresar su solidaridad a los familiares de la víctima. Este acuerdo fue tomado con los votos a favor de UCD y las abstenciones de los diputados forales abertzales García de Dios (HB) y Bueno (Amaiur).

Entre las numerosas notas de condena de este atentado, el presidente del Parlamento Foral de Navarra, Víctor Manuel Arbeloa (PSOE), dice que «los grupos que han elegido la vida política y pacífica de acción, pero que coinciden con ETA estratégica y políticamente, deben esforzarse por hacer comprender a la organización armada que ni siquiera por eficacia política es ya posible su lucha. Su futuro está cegado».

Continúan las detenciones

En las últimas horas, un total de doce personas han sido detenidas por inspectores del servicio de la Brigada Regional de Información de Pamplona en Tudela y la capital navarra, así como por la Guardia Civil de Irurzun. Los detenidos en Tudela son: Antonio Márquez, Santiago Lorente, Manuel Jusué, Javier Pérez de Obanos, Alfonso Giménez Pérez, José María Clemos, Fernando Arnedo, Alejandro Gil y Martín Oliván. De igual modo, ha sido detenido en un acuartelamiento de Madrid el soldado Manuel Clemos Riezu, que ha sido trasladado a la comisaría de policía de Pamplona, en donde permanece incomunicado junto a las otras nueve personas, ya que se les ha aplicado el decreto sobre seguridad ciudadana. La policía les acusa de pertenecer a comandos de ETA Militar. Por su parte, la Guardia Civil detuvo ayer en Irurzun a Florentino Beraña, de Irañeta, que ya había sido detenido la pasada semana, y a Miguel Angel Ederra.

Por otra parte, la policía ha desarticulado un presunto comando de ETA Militar que operaba en Alava. El grupo, denominado Treviño, estaba formado por Luis Javier Izaga, José Miguel López de Muniaín, Saturnino López Domaica y Amaya Landa. Se les han ocupado una metralleta Stein, con dos cargadores, doscientos cartuchos de 9 milímetros Parabellum, cinco granadas y material para preparar explosivos.