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El diseño de objetos de fumador, nueva fuente de conflictos para Dalí

Ante el Tribunal Supremo del Estado de Nueva York está en trámite una acción judicial relativa a un contrato sobre el modelo y los derechos de reproducción de un paquete de cigárrillos, un mechero y otros útiles de fumador diseñados por Salvador Dalí. El demandado es el abogado de Enrique Sabater -Michael Ward Stout-, y el demandante, Eduardo Ubart, antiguo amigo de Dalí, que estuvo encarcelado en varios países europeos por presunta emisión de cheques al descubierto. La posesión del contrato en litigio puede implicar beneficios del orden de millones de dólares.

La demanda contra el abogado Stout empezó en abril de 1977. Pero en estos últimos días es cuando el procedimiento judicial ha entrado en una fase decisiva. Ayer mismo debía tener efecto una declaración oficial de Stout, dentro del procedimiento anglosajón de la acción previa al juicio, de pleno valor probatorio. El demandante, Eduardo Uhart, fue interrogado, en una acción de este orden, a finales del mes pasado.Un marchante de arte chileno residente en Nueva York facilitó a este diario el teléfono de Uhart en aquella ciudad. Pero éste rehusó facilitar información detallada. Afirmó únicamente que se trataba de un litigio importante, en el que se enfrenta con Stout, quien antes de ser el abogado de Sabater -y en repetidas ocasiones también el de Salvador Dalí- había sido el abogado del propio Uhart.

Una fuente jurídica neoyorquina, ajena al litigio, informó del contenido de éste. Resulta que Uhart conoció a Dalí en 1972. Habría sido Uhart,quien presentó a Stout (entonces su abogado) a Dalí y Sabater.

Había tenido antes de entonces problemas con la justicia, que empezaron con una detención en Dinamarca y continuaron con procedimientos penales en otros países europeos, siempre por emision de cheques,sin fondos.

"La Jirafa"

Uhart firmó con Dalí un contrato por el cual éste le cedía el diseño de un paquete de cigarrillos, una boquilla, un mechero y una caja para tabaco. El diseño era una jirafa, de cuyo cuello surgían llamas. Estaba pensado para ser vendido a una compañía de tabacos que quisiera comercializar la marca Jirafa.Importantes empresas estarían interesadas en el diseño. De ser cedido éste, reportaría unos enormes beneficios, proporcionales a la venta de cajetillas de tabaco. El gran valor comercial en ciernes del diseño de Dalí es el que motiva tan prolongada acción judicial.

En el terreno formal, el conflicto surge cuando Uhart entrega su contrato y los diseños de Dalí a Stout como garantía de un préstamo de 30.000 dólares (más de dos millones de pesetas). Al parecer, Uhart afirma que devolvió el préstamo dentro del plazo convenido y que Stout debe devolverle el contrato y los diseños. En cambio Stout negaría haber recuperado su dinero dentro del plazo convenido, con lo cual el contrato que tenía como garantía pasaría a su poder.

La fuente jurídica neoyorquina manifestó que, por parte deStout, se hace hincapié en el pasado judicial de Uhart, mientras que éste afirmaría que posee testigos de que el présiamo fue devuelto y que, por tanto, debe recuperar el contrato. Si éste quedase en manos de Stout el diseño dé los cigarrillos La Jirafa podría convertirse en una pieza más del entramado comercial que rodea la obra de Dalí, creado por Sabater con la ayuda de Stout.

Este diseño sería anterior a contratos firmados por Dalí con Isidro Clot Fuentes, quien posee exclusiva mundial sobre proyectos de joyas y objetos parecidos, en sentido tan lato que puede comprender diseños como los que ahora están en litigio.

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