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Telesforo Monzón falleció ayer en Bayona

Telesforo Monzón, máximo exponente de la coalición independentista vasca Herri Batasuna (HB), falleció a consecuencia de un paro cardiaco, pasadas las cinco de la tarde de ayer, en una clínica de Bayona (País Vasco francés). Monzón contaba 76 años y padecía del corazón desde hace tiempo.Al parecer, Monzón se había sentido mal el sábado por la noche, por lo que fue trasladado desde su residencia de San Juan de Luz a la clínica cardiológica Paullmy, de Bayona, durante la madrugada del domingo. Ya el 17 de enero había sufrido una cardiopatía isquémica que motivó su ingreso en la unidad de cuidados intensivos de la residencia de la Seguridad Social Nuestra Señora de Aránzazu, de San Sebastián, donde fue sometido a tratamiento. Dado de alta el 17 de febrero, después de abandonar el centro hospitalario se sometió a una completa revisión en Bilbao.

Desde ese momento, Monzón había permanecido apartado casi por completo de la actividad política y del contacto con los medios informativos, cumpliendo el período de descanso que le impusieron los médicos en San Juan de Luz. Sus actuaciones públicas habían disminuido de forma notable desde el pasado año y se advertía ya entonces su debilidad.

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Telesforo Monzón falleció en una clínica de Bayona (Francia)

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Telesforo Monzón era en la actualidad diputado del Parlamento vasco, elegido hace un año por la provincia de Alava, en la que se presentó encabezando la lista de HB. Una vez conseguido el escaño, renunció al que ya tenia en el Congreso de los Diputados para el que había sido elegido en marzo de 1979 por Guipúzcoa De acuerdo con la política de la coalición, sin embargo, no llegó a ejercer actividad parlamentaria alguna.

Los funerales por el alma del político fallecido se celebrarán en Vergara (Guipúzcoa), seguramente hoy, martes, aunque a última hora de la noche fuentes familiares indicaban que no se había confirmado este extremo, ya que podrían presentarse dificultades burocráticas para el traslado del cadáver.

Telesforo Monzón estaba casado con Josefa Munoa. El matrimonio no tenía ningún hijo. Además de la actividad política y la dedicación literaria, Monzón se ocupaba de los negocios familiares.

Un nacionalista radical

Como él mismo se encargaba de recordar, Telesforo Monzón fue sobre todo un jelkide, un seguidor del lema que Sabino Arana dio al nacionalismo vasco original, "jaungoikoa eta lege zarra» (Dios y leyes viejas). Sin embargo, la lectura que Monzón hizo de la elemental ideología nacionalista le llevó a una actividad política tormentosa y contradictoria.

Monzón nació el 1 de diciembre de 1904 en la torre Olaso, en Vergara (Guipúzcoa), hijo de un aragonés y de una vasca. A su apellido original añadió el Olaso, de la torre donde residía su familia, y en alguna época de su vida llegó a silenciar el primero, reduciéndolo a una letra.

Su carrera política sería fulminante. Desde una concejalía de su pueblo natal, salta al consejo provincial del Partido Nacionalista Vasco (PNV), que llegaría a presidir, y ocupa un escaño en el Congreso de los Diputados. Cuando estalla la guerra civil, Monzón se convierte en el ministro más joven del Gobierno vasco. Desde la cartera de Gobernación, en el marco del Estatuto de Autonomía aprobado por las Cortes republicanas, despliega una intensa actividad en países europeos para conseguir armas y organiza los cuerpos; de seguridad vascos, con los que, controla férreamente la calle.

Su obra literaria

En el exilio, Monzón se dedica a su obra literaria, que inicia con un gran poema, Urrundi (Desde la lejanía), y desarrolla en más de media docena de obras teatrales, y otros libros diversos, siempre en lengua vasca. Canciones que él mismo musicó, como Batasuna (Unidad), Lepoan artu (Ponlo en el hombre), e Itziaren semea (El hijo de Itziar), llegaron a hacerse populares en Euskadi, rodeándole del nimbo carismático que le acompañó en los últimos años de su vida.

Monzón se enfrentó con los dirigentes del PNV desde los años cincuenta, llegando a la ruptura personal con el lendakari. José Antonio de Aguirre se opuso a sus intentos para inscribir el nacionalismo en un pacto que restauraría simultáneamente la democracia y la Corona en España, en la persona de Juan de Borbón. Con este proyecto, regresaba Monzón en cierto modo a sus inclinaciones monárquicas anteriores a la conversión nacionalista.

La aparición de ETA le permitió desarrollar el que sería su discurso preferente: la unidad de los abertzales (patriotas). Sin embargo, los contactos en los que participó en el País Vasco francés para restablecer los lazos entre el PNV y ETA no fueron autorizados por el partido.

Ana¡-Artea

Es en los años setenta cuando Monzón retorna con fuerza al primer plano. Desde la asociación Ana¡-Artea, dedicada a la acogida de los refugiados políticos, que él contribuyó a fundar en San Juan de Luz, tomó en sus manos la negociación con Alemania sobre la suerte del cónsul Behil, secuestrado por ETA durante el consejo de guerra de Bur-os, dándose a conocer ante la Prensa internacional y las cámaras de televisión.

Durante los últimos años del franquismo trató de convertirse en catalizador de la Batasuna, la unidad que predicaba, desde su finca de San Juan de Luz dedicado al cultivo de frambuesas.

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