A Quini se le esperaba en la comisaría central de Barcelona

La liberación de Quini se esperaba que se produjera en cualquier momento a las tres de la madrugada, tras la decisión adoptada por el Barcelona de hacer efectivo el pago de cien millones de pesetas como rescate. A altas horas de la madrugada, la intensa actividad policial denotaba que el secuestro llegaba a su fin, y a Quini se le esperaba en la comisaría central de Barcelona para instruir las primeras diligencias del caso. El detalle de cómo se realizó el pago aún no se conocía, pero, al parecer, fue al otro lado de los Pirineos.De confirmarse la liberación del jugador barcelonista, todos los problemas en torno al partido con el Atlético quedarían arreglados. De cualquier manera, no es previsib.le que Quini actúe mañana, aunque sí que esté en la grada.

La popularidad enorme de Quini y el impresionante dispositivo policial hacía prever que a los secuestradores les quemaba seguir con el jugador retenido. Por ello no les importó reanudar los contactos telefónicos con el domicilio de Quini, para llegar a un acuerdo. Así, a la llamada que se produjo el jueves y de la que informó EL PAIS ayer, hay que añadir otras dos más ese mismo día, en las que se quedó a la espera de un nuevo contacto. Este, en efecto, se produjo ayer, y en dos ocasiones. En el domicilio del jugador se encontraban en la primera llamada, al margen de los miembros de la familia, los dirigentes azulgrarías Casaus, Gaspart y Parera, aunque no el presidente, Núñez, al parecer fuera de Barcelona en esas horas, sin que se haya podido confirmar dónde. Núñez llegó hacia las cuatro de la tarde, acompañado del hermano de Quini, el meta del Spórting, Castro, y dos inspectores de policía. Al parecer, la nueva llamada se produjo poco después.

Asimismo, el vicepresidente azulgrana, Joan Gaspart, junto con Castro, acudió posteriormente al Gobierno Civil para informarse de de los últimos detalles en torno a la situación.

La policía controló cien llamadas telefónicas

La policía continuó su intenso trabajo ayer, al mando del jefe superior, Enrique Mosquera, comprobando una y otra vez las numerosas llamadas de personas deseosas de colaborar. En concreto, ayer se controlaron casi cien llamadas con diversas pistas ofrecidas para la localización del jugador. Los controles en la Ciudad Condal fueron asimismo visibles en diversos puntos, y también fue importante el dispositivo que ejerce la Guardia Civil en la provincia.

Respecto a la mujer de Quini, Mari Nieves, en las últimas veinticuatro horas también se ha podido conocer que se encuentra en una mayor relajación. A las ocho de la mañana volvió a acudir a la iglesia de Santa Gema, cercana al domicilio para rezar en compañía de su cuñada, la mujer de Alexanco, el meta Amador y el relaciones públicas del club Oscar Segura. También cabe señalar que Mari Nieves ha enviado una nota de ánimo y agradecimiento a los jugadores del Barcelona,dado su comportamiento hacia la situación de su marido durante toda la semana. Asimismo, Jordi Pujol, presidente de la Generalidad, ha enviado un escrito a la plantilla, alentándola en estos momentos difíciles.