Martín Villa afirma que el Gobierno acelerará la elaboración de los estatutos pendientes
«Es voluntad del Gobierno acelerar al máximo la elaboración de los estatutos de autonomía», declaró el ministro de Administración Territorial, Rodolfo Martín Villa, al término de las reuniones que celebró ayer en Madrid con presidentes de entes preautonómicos de toda España.
No estuvieron presentes los presidentes de la Generalidad de Cataluña ni del Gobierno Vasco, pues, según explicó el ministro, la situación jurídica de las comunidades que representan es diferente, al disponer en la actualidad ,de Parlamento. Hubo una primera reunión, por la mañana, con los presidentes preautonómicos que son militantes de UCD, y otra posterior con los tres socialistas (Andalucía, Asturias y Murcia), que almorzaron con el ministro.Martín Villa señaló que durante el presente año se acelerará la tramitación de los estatutos de autonomía, y que si bien es excesivamente optimista pensar que a finales de 1981 estarán todos aprobados, con toda seguridad lo estarán antes de que concluya la actual legislatura.
Las reuniones se desarrollaron en un tono que el ministro calificó de «distentido», y algunos presidentes preautonómicos, como el socialista Rafael Fernández, de Asturias, o el centrista José Quiroga, de Galicia, hablaron del carácter satisfactorio de las respectivas entrevistas. No obstante, el presidente de la Junta de Andalucía, Rafael Escuredo, discrepó con la transformación de las comisiones mixtas de transferencias, antes de carácter territorial, en comisiones por sectores, prevista en un reciente decreto.
Martín Villa explicó a EL PAIS las razones de este cambio, señalando que se había llegado a una cantidad desorbitada de comisiones al haberse diversificado por materias las territoriales. Además subrayó que el techo de competencias será igual para todas las preautonomías, lo que se puede conseguir mejor de este modo.
Precisamente este punto es el que hizo decir a Escuredo que el decreto es «inaceptable», puesto que Andalucía está en la vía autonómica del artículo 151 de la Constitución. Para el presidente andaluz, «el Gobierno pretende una vez más desconocer el resultado del 28 de febrero», controlando de esta forma el proceso negociador. «Así», dijo Escuredo, «gana en Andalucía lo que perdió en Andalucía».
No obstante, el resto de temas que Escuredo planteó al ministro recibió respuestas satisfactorias, a juicio de aquél. Martín Villa dijo que el Gobierno convocará, antes de que finalice febrero, la asamblea de parlamentarios andaluces para redactar el definitivo proyecto de estatuto. Con respecto a la puesta en marcha del Plan de Urgencia para Andalucía (PUA), y siempre según Escuredo, el ministro se comprometió que trataría el tema con el ministro de Economía y Comercio, Juan Antonio García Diez.
En cuanto al porqué de la reunión, Martín Villa manifestó que se inscribe en los contactos periódicos que ya inició con todos y cada uno de los presidentes de las distintas comunidades al incorporarse al Gobierno. En este sentido dijo que es necesario institucionalizar las reuniones entre el Gobierno y los representantes de las comunidades autónomas.
Añadió que estas reuniones continuarán celebrándose en el futuro, con el fin de estudiar los contenciosos que los entes preautonómicos tienen pendientes con la Administración, para ir salvando los obstáculos entre todos. Se elaborará un cuestionario en el que las comunidades expresarán las dificultades surgidas en sus respectivos procesos.
En las reuniones de ayer estuvieron presentes el secretario de Estado para las Autonomías, Manuel Broseta, y el director general de Coordinación de las Comunidades Autónomas, Alfredo Pérez de Armiñán. También asistieron los directores generales del Ministerio de Hacienda y del Ministerio Adjunto para Administración Pública, puesto que se trataron especialmente problemas de transferencias de personal, medios financieros, edificios y otros medios materiales.
En concreto, el presidente del Consejo Regional de Asturias, Rafael Fernández, señaló al término de la reunión que había expuesto la necesidad de que dicho órgano participe en las empresas públicas instaladas en la región, tema sobre el que se iniciarán en breve conversaciones especificas.
En otro orden de cosas, el PSOE de Andalucía difundió ayer tarde un comunicado en el que manifestaba su disconformidad con la conducta del ministro al recibir primero a los presidentes centristas y más tarde a los socialistas, calificándola de «partidista y descortés».
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