La dirección de Hunosa advierte que la Administración subvencionará los déficit con limitaciones

El constante aumento de los costes compromete la continuidad de Hunosa a corto plazo, según advirtió ayer Luis Solera, consejero delegado de esta empresa pública, cuya plantilla supera los 22.000 trabajadores. Su tesis es que España necesita el carbón de Hunosa, pero no puede pagarlo a cualquier precio. El Estado español ha decidido sustituir su política de subvencionar las pérdidas de Hunosa, sea cual fuere su cuantía, por una fórmula que consistirá en fijar una cantidad máxima de subvención por tonelada extraída.

La Administración elabora actualmente los objetivos para el período 1981-1983 y está dispuesta a abrir una negociación entre la dirección de la empresa y los representantes de los trabajadores para elaborar los planes que permitan alcanzar dichos objetivos.El Estado continuará subvencionando la explotación del carbón, como ocurre en otros países europeos, pero ahora trata de fijar unos límites y las condiciones en que está dispuesto a colaborar en el mantenimiento de los yacimientos deficitarios. Con esta política se trata, según Luis Solera, de asegurar el futuro de Hunosa, que dependerá de un pacto económico con la Administración que eludirá los tradicionales cauces de financiación de las pérdidas y el recurso a los créditos extraordinarios, generadores de incertidumbre y del deterioro de la imagen de la empresa ante la sociedad española.

La reunión de la dirección de la empresa con los representantes sindicales, celebrada anteayer en Oviedo, finalizó con una falta total de acuerdo. El responsable de CC OO, Marino Artos, estima que se pretende reducir el tamaño de Hunosa a la mitad, para adecuarlo a los 16.000 millones de pesetas fijadas para este ejercicio en los Presupuestos Generales del Estado. CC OO continúa los preparativos para la huelga general convocada para el próximo día 23 en las cuencas mineras en defensa de Hunosa. La convocatoria unilateral por parte de este sindicato ha sorprendido al SOMA-UGT, pese a que la víspera de su publicación en la Prensa habían mantenido una reunión en la que los dirigentes de este sindicato no fueron informados de las intenciones de CC OO. El SOMA-UGT hizo público posteriormente un comunicado en el que afirma no tener inconveniente en aplazar el paro previsto por su parte hasta una fecha que se fije de mutuo acuerdo entre los sindicatos mayoritarios, evitando así una cadena de convocatorias unilaterales que fragmentaría la cohesión y fortaleza de la respuesta, y contribuiría al desconcierto de los ciudadanos».

Las centrales coinciden

Las dos centrales sindicales coinciden en solicitar la participación del Consejo Regional de Asturias en las negociaciones sobre la reestructuración de Hunosa, la inmediata discusión del convenio colectivo, la reprofundización del pozo Barredo, amenazado de cierre, e interlocutores válidos en dicha negociación. Según un informe del SOMA-UGT, la explotación de Barredo, a través de Minas de Figaredo, supondría un coste adicional de 386 millones de pesetas; en consecuencia, se muestra partidario de continuar las obras de reprofundización en las que se han invertido ochenta millones de una inversión total de 208 millones. El sindicato socialista asegura que sus reservas permiten mantener la explotación por lo menos durante 34 meses.