¿Dos presidentes?
En relación a la carta de Fernando Pulín, autotitulado presidente de Adelpha, publicada el 4 de los presentes, sin ánimo alguno de iniciar polémicas, por otra parte innecesarias.Serán los tribunales de justicia los que determinen la legalidad de la junta directiva de Adelpha, que me honro en presidir. En el interín, a nivel de hechos, tanto las diferentes administraciones públicas como los medios de opinión saben perfectamente que no hay otra Adelpha que ésta que presido, y que es la Adelpha de siempre, con sus habituales equipos, colaboradores y trabajos. Por consiguiente, y dado que el único interés que nos mueve es el de la defensa del patrimonio histórico, yo sugeriría a don Femando Pulín y al reducido grupo de personas -casi todas ajenas a la asociación- que dicen secundarle que dejaran de lado estériles discusiones acerca del derecho a utilizar unas siglas, en sí mismas inútiles, y pasaran a secundar a la legítima Adelpha en su diaria tarea de promoción del maltrecho legado cultural material del país, en la que estamos más que necesitados./ , duque de Segorbe, presidente de Adelpha.
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