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Los trabajadores de Olarra piden la mediación del Gobierno vasco

La asamblea de trabajadores de Olarra, SA, acordó solicitar la mediación del Gobierno vasco de cara a la apertura de negociaciones entre la empresa, por una parte, y una comisión mixta centrales sindicales-comité de empresa, por otra, como vía para dar una salida al conflicto, iniciado a mediados de octubre y que afecta a 2.000 trabajadores. Esta propuesta parece indicar una cierta flexibilización en la postura de la asamblea, opuesta hasta el momento a una intervención directa de las centrales en la negociación.

La nueva propuesta fue aprobada por una asamblea en la que participaron entre 700 y 1.100 trabajadores -según las distintas fuentes-, celebrada poco después de que diversos incidentes surgidos entre sectores enfrentados de la propia asamblea obligase a suspender una reunión previa en la que participaban entre 1.000 y 1.400 trabajadores. Respecto a estos incidentes, fuentes del comité de empresa hicieron pública ayer una nota en la que salen al paso de la versión de los mismos difundida a última hora de la noche del miércoles, por la oficina de Prensa del PNV, y de la que EL PAIS se hizo eco en su segunda edición de ayer. Según el comité de empresa, la propuesta de expulsar de la asamblea a los empleados del sector de oficinas -a los que acusaban de haber facilitado con sus declaraciones ante el juez el procesamiento de algunos trabajadores- fue aprobada por la mayoría de los asistentes. Fue, según dicha versión, la resistencia de estos empleados a abandonar el local lo que determinó los enfrentamientos posteriores y la escisión de hecho de la asamblea en dos grupos, el más numeroso de los cuales fue el que aprobó, reunido en una plaza cercana, la nueva propuesta de negociación, en la que, aún insistiendo en que la retirada de los despidos es «condición necesaria para la normalización de la situación», se admite que serían negociables «las condiciones de reincorporación».

Comisión de investigación

La asamblea aprobó también crear una comisión de investigación sobre las condiciones en que se produjo la suspensión de pagos de Olarra y organizar una marcha de la plantilla hacia la sede del Gobierno vasco en Vitoria, que se iniciaría a primera hora del sábado.

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