Dimisión del ministro de Industria italiano por el "escándalo del petróleo"

El ministro italiano de Industria, Antonio Bisaglia (democristiano), anunció ayer su dimisión «irrevocable». Bisaglia, de 51 años de edad, es uno de los personajes claves del ala conservadora de la Democracia Cristiana y uno de los principales adversarios de establecer una colaboración para gobernar con el partido comunista.

El ministro dimisionario ha sido frecuentemente acusado, incluso en el Senado, de corrupción y, más concretamente, de estar involucrado en el «escándalo del petróleo». En la Cámara alta salió a relucir una carta escrita por el periodista asesinado, Pecorelli, de la que se desprende que el dirigente democristiano subvencionaba a la agencia de Prensa dirigida por el propio Pecorelli, que tiene claras vinculaciones con los servicios secretos italianos y ha chantajeado en más de una ocasión a algunos políticos.

Bisaglia ha explicado que su dimisión no guarda relación alguna con el veredicto que el tribunal de honor del Senado dará a conocer, el próximo lunes, sobre la autenticidad de la carta de Pecorelli.

El gesto del líder democristiano se debe más bien, afirmaron ayer unánimemente los observadores políticos, al hecho de que había sido anunciado para esta mañana un encuentro del presidente del Gobierno, Arnaldo Forlani, con los secretarios de los cuatro partidos que forman el actual Gobierno de centro-izquierda para discutir de la moralización de la vida política después del escándalo del petróleo y del terremoto.

Se daba por muy probable que socialistas, republicanos y socialdemócratas, iban a pedir abiertamente la dimisión del ministro de Industria no sólo por estar acusado de complicidad en varios escándalos financieros, sino también por considerar incompatible su cargo con las responsabilidades que asume en las Assigurations Generali, una de las empresas de seguros más importantes del país.