Kania advierte a las fuerzas "antisocialistas" que no habrá un doble poder en Polonia
Stanislaw Kania, primer secretario del Partido Obrero Unificado Polaco (POUP comunista) lanzó ayer en el séptimo pleno de su Comité Central, que inició sus trabajos en Varsovia, una dura advertencia a las fuerzas «antisocialistas que están encubiertas en el sindicato libre Solidaridad», y que desean «derrocar el régimen socialista». Aseguró además, que en Polonia «no hay ni habrá doble poder».
Kania inauguró este pleno, que durará al menos dos días, en medio de un ambiente de división interna y a la espera de nuevas depuraciones de oponentes a Kania. Se espera igualmente el anuncio de la fecha del congreso extraordinario del POUP, el anterior ordinario se celebró el pasado mes de febrero.A pesar de que el primer secretario convino en que era necesario una buena relación Gobierno-sindicalismo libre, aseguró que esta «no sería fácil». En relación con las tensiones del POUP, afirmó que la «unidad de acción» no consentiría el «fraccionalismo» y que tanto «conservadores como «desviacionistas» no tienen lugar en la nueva política.
Kania abrió la sesión con la lectura de un informe titulado «Las tareas del partido en la lucha por el carácter socialista de renovación de la vida social».
Seguidamente, el primer ministro, Jozef Pinkowski, también miembro del Buró Político, máximo órgano del POUP, presentó la situación económica del país y las tareas del partido para hacerla frente.
La reacción contra el pluralismo sindical, inédito hasta ahora en un régimen del Este europeo, es el punto crucial de la campaña de los dogmáticos o conservadores del POUP en su oposición a la línea de Kania.
Después de sendos informes se pasó a la discusión, en el seno del Comité Central, de las medidas de renovación, lo que supondrá el cambio de algunos dirigentes, como ya viene sucediendo desde el cuarto pleno, el pasado 24 de agosto, cuando cayeron personajes afines a la línea dogmática y otros fieles del ex primer secretario, Edvard Gierek.
Además de la línea de Stanislaw Kania, partidaria de contemporizar con el actual proceso de cambio y llevarlo adelante sin sobresaltos, los dogmáticos son partidarios de «ganar tiempo», probablemente para obtener un deterioro de la situación que obligase a algún tipo de intervención del Pacto de Varsovia.
Pero también se oponen a Kania, desde otra perspectiva más liberal, las bases del partido en algunas regiones, despuntando de manera especial la de Lodz, región textil de Polonia, cuyos delegados han planteado desde hace días una clara oposición a Kania y a los dogmáticos, exigiendo no sólo la rápida convocatoria del congreso extraordinario del POUP, sino «una desideologización del partido». Así, el órgano del partido en lodz, Glos Robotnizcy, atacó el pasado viernes el «sectarismo» del partido y la «necesidad» de llevar reformas profundas «para ganarse la confianza de la sociedad». Incluso se permitió, mencionar la situación de pluralismo entre el Partido Socialista Polaco (PPS) y el comunista (PPK), existente en 1948, «antes de la fusión de ambos en el POUP actual».
Los representantes de Lodz, llegan incluso a solicitar abiertamente el pluralismo político.
Advertencia soviética
Por otra parte, se comenta el artículo de la agencia soviética Tass del pasado domingo, en el que recogiendo un comentario del periódico checoslovaco Rude Pravo, se refirió a una eventual intervención del Pacto de Varsovia en Polonia.Según Rude Pravo, reproducido por Tass, la situación polaca actual es equiparable a la que vivió Checoslovaquia en 1968, antes de la invasión del 21 de agosto. La agencia insiste «en las fuerzas hostiles internas y externas de Polonia», que desean «la contrarrevolución en un país socialista».
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