Carrillo apoya la propuesta de reunificación de Corea
Santiago Carrillo, secretario general del Partido Comunista de España (PCE), emprenderá hoy viaje de regreso a España, tras su estancia de tres semanas en China y Corea del Norte. Horas antes de subir al avión, Carrillo declaró a EL PAIS que el viaje ha superado los objetivos que se había marcado, y puso de manifiesto que no había encontrado en los dirigentes chinos voluntad alguna de establecer una alianza militar con Estados Unidos. Asimismo subrayó su apoyo a la propuesta de reunificacíón de Corea, efectuada por el presidente Kim Il Zum, y su confianza en que los norteamericanos tengan en cuenta este plan.«China no pretende aliarse con Estados Unidos en contra de la Unión Soviética», afirmó Carrillo, «sino lograr la coexistencia pacífica con todos los países, incluidos los capitalistas, que le permita avanzar en la modernización del país. China necesita tecnología y créditos de Estados Unidos o el Japón, y nadie puede asombrarse por ello, puesto que varios países socialistas tienen créditos de países occidentales. Ahora bien, es cierto que China está alarmada por conflictos como los de Afganistán o Kampuchea, o el estacionamiento de tropas en su frontera, y estoy convencido de que si la URSS tomara medidas para deshacer esa situación, las posibilidades de mejoría de la situación entre ambos Estados serían reales».
Por otra parte, Carrillo niega que este largo contacto con el comunismo asiático implique una voluntad del PCE de romper totalmente con Moscú, al igual que no lo fue el viaje de Berlinguer, secretario general del PC italiano, en la primavera pasada. «Los partidos eurocomunistas», dice, «nos sentiríamos muy satisfechos si pudiéramos contribuir a que disminuya la tensión chino-soviética, aunque eso exigiría mayor comprensión de los soviéticos hacia lo que nosotros estamos haciendo».
Respecto al juicio a los máximos responsables de la revolución cultural, el dirigente comunista español cree que el público quizá no percibe «todo el fondo de aquel drama. Cuando hemos recorrido el país nos hemos tropezado con gente que ha estado diez o doce años en la cárcel, y nos damos cuenta de que muchos millones de personas han sufrido en carne propia un proceso que, según los mismos chinos, ha tenido aspectos fascistas: el papel del Partido Comunista se vió anulado y se estableció la dominación de una camarilla, que especuló con la autoridad de Mao Zedong en sus últimos años de vida».
Relaciones con España
Carrillo cree que el Gobierno español debe incrementar sus relaciones con China, sobre todo en el orden cultural, como preparación para la colaboración económica «En este país», dice, «hay crédito abierto a España, tras la visita del rey Juan Carlos, que produjo una excelente impresión. Creo que esto debería ser el comienzo de una orientación política de largo al cance, no expuesta al juego de los partidos, sino tomada como política de Estado».Desde el punto de vista del PCE, el secretario general de este partido confía en que no haya mucha oposición al paso que ha dado la dirección. «Nosotros teníamos interés en reanudar una amistad interrumpida desde hace años», explica, «pero además nos ha guiado la idea de que es preciso recuperar la unidad del movimiento comunista internacional, sobre la base de que cada partido elabore su propia línea, sin que pueda ser instrumentalizado por una potencia. Y China, sin entrar en detalles sobre el eurocomunismo, contempla con simpatía nuestros esfuerzos en pro de una vía original para el socialismo: ese país, junto con Yugoslavia, son los únicos que han publicado mi libro Eurocomunismo y Estado».
Por lo que se refiere a Corea del Norte -en cuya capital, Pyomgyam, presidió ayer un mitin ante 10.000 personas, televisado en directo-, Carrillo destacó que este es uno de los pocos países del mundo en que puede hablarse verdaderamente de milagro económico, aunque el fenómeno sea prácticamente desconocido en Europa. Asimismo opina que el programa de reunificación de Corea, propuesto por Kim Il Zum, «constituye la manera más inteligente de salir del embrollo coreano», y que Estados Unidos debiera estudiar la posibilidad de dialogar acerca del mismo.
Estas declaraciones de Carrillo, que resumen las actividades realizadas durante el viaje, pueden completarse con el dato de que los dirigentes chinos, y sobre todo los coreanos, están estudiando la posibilidad de invitar a Felipe González, secretario general del PSOE, a visitar sus respectivos países.
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