_
_
_
_

"No encuentro problemas para asegurar en el futuro el suministro de petróleo a España"

Irán, con 36 millones de habitantes y una superficie más de tres veces superior a la de España, es uno de los países clave para la economía occidental por sus riquísimos yacimientos de petróleo situados a lo largo del Juzestán, donde hoy se encuentra el frente de batalla en la guerra irano-iraquí. Con una economía renqueante, las autoridades de la República islámica se plantean ahora la reconstrucción de la vida económica iraní sobre la base de una nueva utilización de las rentas derivadas del petróleo proyectada sobre el desarrollo de una industria nacional y la consolidación de la autonomía y autosuficiencia agraria y alimenticia. Sobre la situación económica iraní, los suministros de crudos a Europa y a España, la influencia de la guerra con Irak y la eventual reanudación de relaciones normales con Occidente versa esta entrevista que el ministro de Finanzas de Irán concedió a EL PAÍS en Teherán.

«Yo no encuentro problemas para que en un futuro podamos asegurar el suministro de nuestros crudos a España. Estamos en condiciones de garantizarlo», aseguró el ministro iraní de Finanzas, Moshen Noorbakhsh, de 32 años, licenciado en Economía por la Universidad de California y profesor de la Universidad de Teherán. El responsable ley Ministerio, iraní de Finanzas asegura que «hasta ahora, Irán no ha encontrado grandes dificultades económicas para afrontar la guerra. Sin embargo», agregó, «hemos tomado algunas medidas de precaución, como por ejemplo el racionamiento de gas o el traslado a otros puntos del país de la actividad portuaria de Jorramshar, que concentraba la mayor parte de las importaciones que entraban en nuestro país».En cuanto, a las repercusiones que sobre la economía iraní podría tener la satisfacción de las exigencias impuestas por Irán para la liberación de los rehenes, el ministro iraní dijo que.«a corto plazo esto no afectaría en nada a la economía de nuestro país, porque tenemos suficientes recursos para encarar nuestros problemas. Respecto a los repuestos bélicos y de armamento, esta pregunta tendría que ser respondida por las autoridades militares».

"No habrá rastablecimiento con Estados Unidos"

Noorbakhsh mostró escepticismo respecto a una eventual normalización de relaciones económicas y financieras con Estados Unidos. «Personalmente no creo que vaya á producirse tal restablecimiento, pero ello dependería de la forma en que Estados Unidos se acerque a no otros. Podríamos expandir nuestras relaciones, pero si Estados Unidos continúa en la línea que ha mantenido con nosotros hasta ahora, no será posible».Para el joven ministro de Finanzas iraní «resulta muy difícil conciliar la normalización de relaciones con Estados Unidos por nuestra necesidad de mantener una línea de independencia económica. No creo en esta conciliación, personalmente, porque ellos, a lo largo del tiempo, no nos han respetado y no creo que ahora vayan a hacerlo. Hay, sin embargo, otros países que sí podrán suministrarnos los productos que este país recibía antes de Estados Unidos, como son los de Europa occidental y Japón».

«Además la dependencia económica no es, en este caso, unilateral», agrega el ministro Noorbakhsh. «Si bien nosotros necesitamos importar de ellos una serie de productos, ellos necesitan de nosotros nuestro petróleo y cada vez van a necesitarlo más. Gran Bretaña, por ejemplo, se ha visto económicamente afectada desde que rompió relaciones económicas con Irán. Ello demuestra que esta dependencia es mutua. En base a todo esto, podemos restablecer fácilmente nuestras relaciones y nuestro mercado con los países de Europa occidental para importar de ellos los productos que exige nuestra economía».

"Utilizar la renta petrolífera"

En cuanto a los proyectos económicos del régimen islámico iraní, Moshen Noorbakhsh considera que se basan fundamentalmente en la utilización de las rentas derivadas del petróleo para desarrollar la industria y la agricultura, con un nuevo sentido dado a las importaciones y orientado a la satisfacción de las necesidades mayoritarias de la población. «En el sector agrario, Irán puede alcanzar muy pronto la autosuficiencia, lo mismo que en el sector alimenticio. Sin necesidad de recurrir a las importaciones tenemos recursos holgados, agua, sistemas de irrigación, que con una planificación adecuada pueden permitirnos la autonomía plena. En la industria, sin embargo, tenemos algunos problemas. Nuestro sistema industrial es prioritariamente de ensamblaje y su transformación en un aparato industrial nuevo acorde con las necesidades de nuestro país va a resultar costoso».Según el ministro iraní, el principal cometido económico que «se va a abordar a partir de ahora en la industria va a ser el de la transformación de esta estructura de ensamblaje en otra propia, para dotar al país de una industria automotriz autónoma, de fabricación de maquinaria. Nosotros conocemos la tecnología y tenemos personal para acometer esta tarea y cuadros para dirigirla. Vamos a destinar grandes partidas de capital para esta tarea».

"El Estado absorberá la gran industria"

Respecto a la configuración que adquirirá la economía iraní, el ministro aseguró que «se basará en la absorción por el estado de la gran industria, pesada y siderúrgica, y mantendrá la mediana y pequeña empresa en manos del capital privado».«Ya hemos empezado la tarea de convertir esta industria de ensamblaje y actualmente el Gobierno provee todas las necesidades para poner en marcha esta transformación, como es el suministro de agua, corriente eléctrica, al igual que las líneas de crédito necesarias».

«No puedo afirmar que exista un modelo económico islámico», concluye el ministro iraní, «pero a grandes rasgos puedo decir que tendemos a consolidar en la vida económica de nuestro país un sistema independiente capaz de conciliar la libertad que se asocia al capital en las economías capitalistas y la justicia que se atribuye a los sistemas económicos socialistas. Realmente esto supone un gran esfuerzo, más acusado todavía ahora, pues nuestro país está en guerra. Sabemos que la tarea será ardua, pero estoy convencido de que nuestro país pronto se colocará a la cabeza de este modelo independiente, donde el pueblo participa en la gestión de la actividad económica y las rentas se transforman en mejoras sociales».

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_