Brotes antimilitaristas en el 25º aniversario de las fuerzas armadas alemanas

Con numerosas manifestaciones antimilitaristas, algunas de ellas, como la de Bremen el 6 de mayo y la de Hannover el pasado martes, con brotes de violencia, se han clausurado en la República Federal de Alemania los actos conmemorativos del 25º aniversario de la restauración de las fuerzas armadas alemanas.

Por parte de éstas, que han reafirmado su voluntad de servicio al orden constitucional establecido y su entronque en la Alianza Atlántica, los oficiales y soldados que han participado en las juras de bandera en estadios deportivos o en plazas públicas, como el miércoles por la noche en Bonn, recibieron impasibles las muestras de desaprobación de los antimilitaristas, de los que, en la capital federal, tan sólo les separaba un cordón policial.Los medios de información coincidieron ayer en comparar Bonn con una verdadera fortaleza: para garantizar el transcurso pacífico del acto, presidido por los presidentes de la RFA y del Parlamento, y por el canciller federal. entraron en acción 5.000 policías. En el centro de la plaza prestaron su juramento castrense 150 reclutas de los tres Ejércitos.

Un día antes, en Hannover (Baja Sajonia), grupos de manifestantes trataron de penetrar en el estadio de fútbol en que se celebraba el mismo acto. Repelidos por la policía, algunos de ellos se lanzaron a las calles del interior de la ciudad y cometieron actos de pillaje, además de destruir vehículos de las fuerzas de seguridad. Según el jefe de policía de Hannover, los manifestantes actuaban coordinados por un extranjero, del que no se ha facilitado información alguna posterior. En todas las ciudades alemanas en las que se han celebrado juras de bandera fuera de los recintos militares también han tenido lugar manifestaciones pacíficas convocadas por los jóvenes socialistas del SPD.

El ministro de Defensa, el socialdemócrata Hans Apel, alabó la disciplina y el sentido democrático de las fuerzas armadas alemanas (Bundeswehr) y restó importancia real a las muestras de desaprobación de un sector considerable de los jóvenes -provistos de pancartas- asistentes al acto. En un templo cercano, cuatro soldados de uniforme protestaron también contra la celebración pública de un «acto anacrónico», como consideran los antimilitaristas las juras públicas de bandera, tradicionales en la RFA, aunque no frecuentes, a lo largo de los últimos veinticinco años.

Peticiones militares

Con ccasión del aniversario, la Unió i Militar Federal, que agrupa a la gran mayoría de la oficialidid de la Bundeswehr, ésta presentó una serie de demandas al Gobierno con el fin de mejorar la efectividad de las fuerzas armadas. En un informe, la asociación lamenta que la falta de 20.000 soldados por el bajo índice de natalidad registrado en las dos últimas décadas ocasiona el que el 12% de los que prestan servicio armado se vea oblizado a rendir cincuenta horas semanales de trabajo; un 50%, hasta sesenta horas; un 28%, hasta sesenta, mientras que las unidades de antiaéreos se mantienen ocupadas incluso setenta noras semanales.La Unión Militar pide que los efectivos se eleven por encima de los ¿ 59.000 soldados y oficiales con que cuenta actualmente la Bundeswehr. Entre las demás Deticiones relacionadas con la alta de personal se incluyen también dos relativas a las mujeres y a los hijos de los extranjeros que hayan nacido en la RFA, y que podrían suplir la falta de soldados alemanes.

Entre los problemas internos de las fuerzas armadas se destaca la falta de entronque de éstas en la seciedad civil, a pesar del criterio «ciudadanos de uniforme» que pretende aplicar el mando militar como complemento del otro criterio básico, el del «mundo interno».