El secuestro no es negociable

Cuando el primer grupo de trabajadores secuestró a un empresario en España para lograr un aumento de sueldo, todos pensamos que aún nos quedaban cuatro locos ignorantes del mundo en que vivían. Pero los cuatro locos resultaron ser muchos más, ( ...)Inimaginable porque nadie recordó que privar a un ciudadano de libertad es un delito, si no se hace conforme a la ley, y parece que tampoco hubo quien se dio cuenta de que algo tendría que ir mal para que se empezase a negociar seriamente la crisis de una empresa con el argumento de la coacción fisica y moral. ( ... )

Nos han asustado los sindicatos porque están politizados o porque nos gustaría que fueran otros y no los que hay. Pero cuando los sindicatos funcionen aquí como en cualquier otro país europeo, dificilmente los cuatro extremistas de turno podrán secuestrar al patrono para imponerle sus condiciones. Porque habrán sido borrados de la adhesión de cualquier trabajador o el sindicato que los mantenga desaparecerá del mapa.

Empresarios y sindicatos ya han dado muestras suficientes de responsabilidad en muchas negociaciones. Este es el camino, y no el de la coacción.

9 de noviembre