Una docena de granadas cae sobre el pueblo madrileño de Moralzarzal
Una docena de proyectiles sin carga explosiva, procedentes del campo de tiro de Hoyo de Manzanares, sembró la alarma, a mediodía de ayer, en el pueblo de Moralzarzal, al caer sobre el casco urbano. Tres de las granadas penetraron en viviendas, que afortunadamente no estaban habitadas en ese momento, y destruyeron parte de las habitaciones y el mobiliario. Aunque no se registraron desgracias personales, sí son estimables los daños materiales. Fuentes militares consultadas por EL PAIS señalaron que se habían realizado unas pruebas de proyección de nuevos materiales. Las gestiones realizadas por el Ayuntamiento consiguieron el cese del fuego y evitar una catástrofe.La Corporación municipal celebró en la noche de ayer una reunión para estudiar la situación creada, y prepara un pleno extraordinario para pedir el cierre del campo de tiro, desde donde ya se han realizado otros bombardeos de este estilo en varias ocasiones.
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