Irán quiere una salida negociada para el tema de los rehenes norteamericanos
Los combates alrededor de las ciudades fronterizas iraníes de Abadán y Jorramshar se han intensificado durante las últimas horas con la intervención de comandos, carros de combate, artillería y aviación, consiguiendo, aparentemente, las fuerzas iraníes detener la progresión «enemiga» y el intento de cerco de las dos localidades. Mientras tanto, se vislumbran posibilidades de que el tema de los rehenes norteamericanos encuentre próximamente una solución negociada.
En el frente norte la jornada. se saldó ayer con algunos retrocesos de la infantería iraquí y nuevos bombardeos de la artillería de Irak sobre la ciudad de Ahwaz, que causaron nueve muertos. Las autoridades de Teherán aseguraron ayer que, durante una incursión de las fuerzas aéreas iraníes sobre Bagdad, el palacio del presidente iraquí, Saddam Hussein, fue alcanzado por las bombas, al igual que la sede del servicio secreto de Irak y el cuartel general del partido Baas.Fuentes militares iraníes informaron ayer en Teherán que la ofensiva de los blindados iraníes sobre Jorramshar y Abadán registró ayer un repliegue de siete kilómetros hacia el interior de las fuerzas destacadas por Irak para rodear los dos enclaves fronterizos iraníes. Según las mismas fuentes, la carretera que une Abadán y Mahshahar, cortada el martes a raíz de los ataques de la artillería y de los tanques iraquíes, fue abierta nuevamente ayer al tráfico civil. Asimismo, las fuentes oficiales iraníes insistieron ayer en que los intentos de cercar Jorramshar y Abadán habían fracasado por la resistencia empecinada del Ejército, los guardias islámicos y los habitantes de ambas ciudades.
¿Solución para los rehenes?
En el plano político, la atención se centró ayer en Teherán sobre las declaraciones del primer ministro, Alí Radjai, sobre el tema de los rehenes norteamericanos, que el próximo día 4 de noviembre cumplirán un año de cautiverio. El primer ministro dijo que Irán desea una solución rápida de este tema, pero Estados Unidos no la quiere».
Para Radjai, un hombre al que le unen fuertes lazos con los dirigentes islámicos, entre otros el ayatollah Bejesti, la liberación de los rehenes norteamericanos pasa por la aceptación de las condiciones que exige Irán. Según fuentes iraníes, la condición que más intransigencia ha provocado es la de la restitución a Irán de los bienes del difunto sha Reza Pahlevi. Para los observadores occidentales, las leyes norteamericanas son especialmente estrictas respecto a las transacciones de bienes de particulares y, sobre todo, su consideración como bienes estatales tras su depósito bajo la forma de bienes privados.
En este punto, los «amagos» de negociación siempre han naufragado por ambas partes. La partida más importante del dinero del difunto sha se encuentra en el Bank of America, según fuentes iraníes, aunque su enorme caudal ha sido distribuido profusamente en otras entidades bancarias norteamericanas y europeas o en otro tipo de bienes o títulos no dinerarios.
Pese a todo, en Teherán reina la impresión de que por parte de Irán el ánimo negociador es más alto que nunca y se baraja la posibilidad de que en los próximos días, tras las declaraciones de Radjai y los puntos de vista ya conocidos sobre el tema del presidente Abolhassan Banisadr, pueda abrirse una nueva vía negociadora más esperanzadora y que incluya una fórmula de salida satisfacforia para ambas partes.
Radjai insistió también en que las propuestas del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas sobre un alto el fuego en la guerra irano-iraquí no son aceptables por Irán, por cuanto que según él implicaría la aceptación iraní de la ocupación de sus territorios por un Ejército enemigo.
La ofensiva diplomática iraní que se observa estos días y que fue planeada por el presidente Banisadr está orientada a romper el aislamiento internacional iraní y parece encontrar ahora sus primeros resultados, aunque todos los observadores desde Teherán aprecian que una de las principales llaves de este bloqueo se halla en el tema de los rehenes norteamericanos.
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