PSOE y PCE se oponen al plan del Gobierno para Andalucía

Las ejecutivas del PSOE y PCE acordaron ayer la defensa de la autonomía andaluza por la vía del artículo 151 de la Constitución, confirmando su voluntad de oponerse a la propuesta gubernamental respecto al 144. Sobre la base de este acuerdo, la siguiente fase consiste en instrumentar el apoyo de las minorías regionales a la modificación de la ley de Referéndum, lo cual implica un acuerdo favorable a la posición propugnada por la izquierda -que Felipe González no descarta-, o una «concertación» fundamentada en el equilibrio de fuerzas. Ambas delegaciones reafirmaron, también la vigencia del pacto municipal.

El encuentro se prolongó cerca de cuatro horas, y en él estuvieron presentes los socialistas Felipe González, Javier Solana, Enrique Múgica, Raimon Obiols, Francisco López del Real y José Rodríguez de la Borbolla, y los comunistas Santiago Carrillo, Simón Sánchez Montero, Ramón Tamames, Carlos Alonso Zalelívar, Jaime Ballesteros y Enrique Curiel. El problema autonómico ocupó la mayor parte de la sesión, y el resto fue dedicado a comentar el pacto municipal de izquierda y algunas cuestiones económicas y sindicales.Las delegaciones de ambos partidos constataron el endurecimiento gubernamental respecto a la conducción de la autonomía andaluza por la vía del artículo 144, y convinieron en que se trata de un problema nacional que debería resolverse por la concertación entre todos los partidos; ambos se mostraron de acuerdo en que cualquier fórmula que se proponga será estudiada por PSOE y PCE -que tienen la llave de la Junta de Andalucía, al disponer de mayoría en este organismo-, para lo cual se mantendrán los contactos complementarios que sean precisos.

Modificación de la ley de Referéndum

En principio, la fórmula contemplada por PSOE y PCE se refiere a la modificación de la ley de Referéndum, cuestión que es formalmente posible por el hecho de que están depositadas en las Cortes cuatro proposiciones de ley en demanda de dicha reforma, firmadas, respectivamente, por PSOE, PCE, PSA y el diputado Manuel Clavero. Los dos principales partidos de la izquierda tratarán de conseguir el acuerdo favorable de las minorías regionales a la modificación, teniendo en cuenta que Coalición Democrática ha llegado a un acuerdo con el PSOE para sumarse a la vía del artículo 151.La izquierda trata de evitar el envío a las Cortes de la ley sobre el artículo 144, ya anunciada por Martín Villa, y forzar a las minorías regionales que votaron la confianza al Gobierno -Convergencia i Unió, PSA- a tomar una decisión respecto a la reforma de la ley de Referéndum, confiando en que el PNV cumpla anteriores promesas al respecto. Para reforzar el efecto buscado, PSOE y PCE pedirán la retransmisión televisada para Andalucía del debate parla mentario correspondiente.

No obstante, en este asunto también existe alguna diferencia en el campo socialista: parte de la ejecutiva piensa que, además de intentar la modificación de la ley de Referéndum, hay que prever una salida para el caso de que fracase; otro sector de la dirección, en el que parece encontrarse Alfonso Guerra, prefiere jugar todas las cartas a la citada modificación y colocar a las minorías frente a sus responsabilidades respecto al pueblo andaluz.

De alguna manera, estos planteamientos estuvieron sobre la mesa de las ejecutivas PSOE-PCE, que dedicaron mucho tiempo a estudiar unos y otros. Al término de la reunión, Santiago Carrillo declaró a los periodistas que "es necesario actuar en común para desbloquear el proceso andaluz», mientras Felipe González, tras constatar que el Gobierno se ha vuelto atrás respecto a la reunión mantenida con el PSOE recientemente, dijo que el pueblo andaluz se ha ganado su derecho a conducir la autonomía por la vía del artículo 151. «Es verdad», agregó, «que con cualquier tipo de ley se puede dar el estatuto que se quiera, pero eso será algo dado desde Madrid, y además la vía que pretende el Gobierno no garantiza su derecho al pueblo andaluz».

Sin apenas tiempo para entrar en profundidad en el tema del pacto municipal, ambas direcciones convinieron en que éste debe ser reforzado, incluyéndose un acuerdo para efectuar campañas públicas de explicación sobre las realizaciones conseguidas que contrarresten la imagen negativa de algunos problemas localizados. No obstante, los detalles serán estudiados en una reunión posterior de secretarios municipales.

Respecto al tema sindical, Santiago Carrillo dijo que, en opinión de su partido, la campaña ya iniciada debe ser lo menos agresiva posible, para evitar el enfrentamiento mutuo después de las elecciones. El secretario general del PCE se ocupó también de aclarar que la reunión con el PSOE «no tiene el significado de un relanzamiento de la posible unidad de las izquierdas».