La autovía Torrejón-Alcalá no estará terminada hasta el próximo enero, a pesar de las previsiones

Las obras de ensanche de la carretera nacional II (Madrid-La Junquera) en el tramo comprendido entre Torrejón de Ardoz y Alcalá de Henares -una de las zonas con mayor índice de accidentes de las carreteras españolas- no estarán terminadas hasta finales del mes de enero de 1981, aunque su finalización estaba prevista para el presente mes de octubre. La ampliación de la calzada sobre el puente del río Camarmilla, próximo al casco urbano de Alcalá, retrasará la terminación total del tramo de autovía, que contará con dos carriles en cada sentido, separados por una valla protectora. Por otra parte, está próximo a salir a información pública el proyecto de desvío de dicha N-II, variante de Alcalá, que partirá de Torrejón y evitará el paso de la misma por la ciudad complutense, uno de los puntos que actualmente sufre mayores atascos circulatorios.

Los 40.000 vehículos que diariamente circulan por el tramo que une Torrejón de Ardoz con Alcalá de Henares y que actualmente encuentran serias dificultades para atravesar el puente sobre el ferrocarril, a la altura del kilómetro veintitrés, comenzarán a notar las mejoras realizadas en la zona a partir de los próximos días de noviembre. Y los siete kilómetros que separaban el final de la autovía de las edificaciones alcalaínas ganarán en seguridad, ya que se elimina ese tercer carril que propiciaba numerosos accidentes y cuyas estadísticas cifran las víctimas mortales en una cada mes. Y aunque no se espera que la velocidad media experimente aumento alguno sí desaparecerán, con toda probabilidad, las largas colas que hasta ahora se forman en las horas puntas y que en los momentos críticos llegan a varios kilómetros, prácticamente los correspondientes al nuevo tramo de autovía.A finales de la pasada semana terminaron las obras de instalación de la valla protectora que separa los dos sentidos de circulación y se daban los últimos toques a la calzada en los tramos menos complicados. Las obras del puente sobre el ferrocarril, con trabajos de mayor envergadura, se realizan a buen ritmo y, salvo complicaciones, estarán terminadas en la fecha prevista. Sin embargo, la necesaria ampliación del actual puente sobre el río Camarmilla, según indicación de la Dirección General de Obras hidráulicas, retrasará la total terminación del trayecto hasta finales de enero de 1981.

En este mismo año está previsto el comienzo de las obras del tramo AIcalá-Guadalajara, para convertir la actual carretera en autovía, con las mismas características del que ahora se termina. En él están previstas dos raquetas para facilitar la entrada y salida del mismo a la altura del campus de la universidad y frente a la báscula de pesaje del Ministerio de Obras Públicas y Urbanismo (MOPU). La primera ya tiene adjudicadas las obras y la segunda se encuentra pendiente de aprobación del proyecto, ya redactado, cuyo importe se elevará a cerca de cinco millones.

La variante, para 1984

Pero si estas obras se consideran importantes para los habitantes de la zona de Alcalá, no son suficientes, según los responsables del ayuntamiento. Los ensanches de las vías de acceso a la población mejoran la circulación, pero no resuelven los enormes atascos que se producen diariamente y prácticamente durante toda la jornada, al atravesar el casco urbano. Mientras no se desvíe el tráfico de la Nacional Il fuera de la ciudad, señalaba a EL PAIS la delegada municipal de Urbanismo, Genoveva Christoff, Alcalá de Henares seguirá dividida en dos partes casi incomunicadas, y los vecinos, separados.Según las previsiones, si se siguen procedimientos de urgencia, la variante de Alcalá, el desvío fuera de la población, podría entrar en funcionamiento para los últimos meses de 1984 o primeros de 1985. En la actualidad, el proyecto está redactado y a la espera de salir a información pública. Tiene dos tramos, cada uno con proyecto distinto, aunque complementarios entre sí. Ante el gran número de alegaciones presentadas al proyecto del corredor del Henares, donde en un principio estaba integrado, fue instruido un expediente aparte para este desvío, con el fin de materializar el paso de vehículos fuera de Alcalá.

El primero de los tramos arrancará del final de la variante de Torrejón (donde comienza el ensanche de la N-II que se construye actualmente) y llegará hasta Camarga de Esteruelas. Para él se ha establecido un presupuesto de 531,7 millones de pesetas. El segundo enlazará Camarga con la Nacional II, una vez sobrepasados cinco kilómetros de Alcalá, en sentido a Guadalajara. Este tramo cuenta con un presupuesto en proyecto de 347,9 millones.

El expediente se encuentra actualmente en el gobierno civil, como trámite previo a su publicación en el Boletín Oficial del Estado, para la apertura del período de información pública. Si la publicación se produce en los próximos días, hasta diciembre, aproximadamente, no se cerrará el período de presentación de alegaciones privadas y de las corporaciones municipales. A continuación, la Jefatura Regional de Carreteras las estudiará y las enviará a la dirección general, que será informada a su vez por un abogado del Estado. Esta tramitación, hará que la aprobación no llegue al Consejo de Ministros hasta finales de la próxima primavera. Si el Gobierno declara de urgencia el expediente de expropiación de terrenos, ésta podría estar hecha para finales de año, ya que el procedimiento reduce los trámites. Consumidos todos estos pasos, comenzaría la construcción, que está prevista se realice en tres años, lo que representa finales de 1984.