Hunosa perderá 4.000 millones más de los previstos

Hunosa perderá este año 22.000 millones de pesetas frente a los 16.000 previstos en los Presupuestos Generales del Estado, según pudo saber EL PAIS. El déficit en la empresa nacional hullera en 1981, estimado en los Presupuestos del Estado presentados anteayer por el ministro de Hacienda, es de 17.700 millones de pesetas.En el actual ejercicio las previsiones de producción se están cumpliendo solamente en un 90%, a pesar de que no hubo conflictividad importante y de la reducción del absentismo. La nueva filosofía de la ayuda estatal a Hunosa trata de introducir el llamado «contrato programa» entre el Estado y la empresa, que deberá ser aprobado antes del 31 de diciembre para el período 1981-1983. En el supuesto de que no cumplan los objetivos, Hunosa tendrá que reducir costes, con una repercusión directa en el personal.

La meta de producción para 1980 es de 4,02 millones de toneladas frente a las 3,59 del año pasado. Este exige unos novecientos kilos por empleado y jornada, teniendo en cuenta que la empresa tiene una plantilla de 23.000 trabajadores.

El comité ejecutivo del Soma UGT hizo ayer público un comunicado en el que realiza un análisis crítico del sector de la minería y de la marcha de Hunosa. El Soma UGT considera un fracaso la reestructuración de la empresa puesta en práctica unilateralmente por la dirección hace seis meses. Sus denuncias se refieren especialmente al continuo cambio de las relaciones laborales, a una práctica sindical diluida por parte de la dirección y al continuo proceso de «fichajes» de titulados superiores, seleccionados «digitalmente».

Relanzar la minería

En cuanto a la situación del sector de la minería, el Soma se muestra partidario de relanzar la economía asturiana a partir del carbón y de exigir de la Administración el cumplimiento del Plan Energético Nacional (PEN) con la autorización de la central térmica de Hunosa,El proyecto de Hunosa de crear una central térmica en Langreo forma parte de un ambicioso plan dirigido a diversificar sus actividades para tratar de reducir las enormes pérdidas, siguiendo el ejemplo de otras empresas carboníferas europeas, pero ha chocado frontalmente con los intereses de las empresas eléctricas.

Los malos resultados de Hunosa tienen seriamente preocupadas a las centrales sindicales y al personal de esta empresa, que teme la aplicación de medidas drásticas en un futuro no lejano. En esta línea, EL PAIS ha podido saber que una importante personalidad vinculada a la región comentó recientemente con el ex vicepresidente económico Fernando Abril la posibilidad de privatizar Hunosa dividiéndola en empresas independientes como única salida a la situación de creciente deterioro. El señor Abril, responsable entonces de la economía española, acogió la idea muy favorablemente. Por otra parte, últimamente se especula con el supuesto interés del Banco de Santander por hacerse con la zona de Candin, en la cuenca del río Nalon, posiblemente la más apetitosa para la iniciativa privada.