El 70% de los detenidos en Euskadi no pasan por los juzgados, según el senador Castells

El caso del diputado foral Urbiola, que sigue en prisión, pese a que el juez decretó hace días su líberación, constituye «únicamente un caso más de los muchos que podrían citarse como muestra de la injerencia directa o indirecta del Ejecutivo en las decisiones del poder judicial», según la opinión expresada ayer en Bilbao por el senador de Herri Batasuna Miguel Castells, en el transcurso de una conferencia de Prensa.Citando un estudio realizado por las gestoras pro amnistía, Castells llamó la atención sobre el hecho de que «más del 70% de las personas detenidas en los últimos tres meses en Euskadi ni siquiera han llegado a pasar por el juzgado, pese a que en muchos de esos casos la propia policía había adelantado, en notas oficiales, graves acusaciones contra los detenidos».

A su vez, de los detenidos puestos a disposición judicial, «un alto porcentaje ha sido puesto en libertad por el juez, ante la falta de base de las acusaciones policiales». Tales notas policiales suponen, a juicio del senador abertzale, una tremenda presión para el juez, que tiene que tomar su decisión después de que la opinión pública ha dado por probados una serie de graves hechos delictivos recogidos en esas notas oficiales».

Esta práctica habría tenido ocasión de ponerse nuevamente a prueba en el caso Urbiola, cuyo aspecto más alarmante es quizá «el hecho de que un diario de Madrid haya podido acusar al juez que decretó la puesta en libertad de Urbiola de prevaricación, al afirmar textualmente que tal decisión había sido tomada por «no se sabe bien qué presiones, aunque las sospechas y algunas informaciones apuntan al amedrentamiento por parte de los etarras y compañeros mártires».

Respecto a la acusación según la cual Urbiola habría mantenido contactos con ETA, «estamos en disposición de ofrecer una larga lista de personalidades que han mantenido ese tipo de contactos, incluidos dos ministros del actual Gabinete», según afirmó textualmente Miguel Cástells.