UCD admite la posibilidad de modificar el Estatuto antes del referéndum

La negociación definitiva del Estatuto de Autonomía para Galicia ha quedado ayer aplazada, una vez más, al no estar de acuerdo las distintas fuerzas políticas sobre la propuesta que finalmente acabó presentando por escrito la UCD gallega. Se produjo, sin embargo, el momento más convergente hasta ahora de todo el período negociador, al admitir UCID, al menos formalmente, la posibilidad de que sea modificado el texto del Estatuto antes de que se celebre el referéndum.

Por boca del diputado Meilán Gil, UCD expuso su criterio de que se vaya a la modificación del texto estatutario en el seno de la Comisión Constitucional, con el concurso y la asistencia de una delegación de la Asamblea de parlamentarios de Galicia, en aquellos puntos concretos en que hoy no están de acuerdo algunas fuerzas políticas que defienden la autonomía. UCD insistió, de todas maneras, en que sería conveniente y necesario contar con la garantía de que este procedimiento no incurra en ningún tipo de ilegalidad constitucional, y se mostró partidaria, a tal efecto, de una consulta previa al presidente del Congreso.Hasta aquí, puede decirse que se produjo, por primera vez, el consenso de todos los partidos que intervienen en el debate (UCD, PSOE, Alianza Popular, Partido Galleguista y Partido Comunista de Galicia). Sin embargo, las diferencias surgieron nuevamente cuando UCD trató de añadir a la propuesta anterior otra alternativa, basada fundamentalmente en el espíritu de «formular una declaración auténtica, que elimine cualquier inseguridad jurídica en la aplicación del Estatuto y garantice que el ejercicio por la comunidad gallega de sus competencias se realice en forma igual a la establecida en los estatutos de las otras comunidades autónomas».

Insatisfacción general

Esta segunda fórmula, en la que se especifican concretamente las interpretaciones que habría de darse a la transitoria tercera y a algunos otros puntos del Estatuto, no satisface a ninguno de los demás partidos, que se muestran favorables a la modifilcación estatutaria y a aplazar la interpretación de si esta modificación puede o no ser constitucional.

Llegados a este punto del debate, se produjo, una vez más, el atasco, y la reunión hubo de ser aplazada nuevamente para el lunes próximo. La impresión más fácil de obtener es la de que UCD llegó ya al máximo de las concesiones que está dispuesta a ofrecer, y que tanto los comunistas como los socialistas están cada vez más decididos a no admitir una simple interpretación del texto autonómico, que luego pudiera prestarse a dependencias de la coyuntura política de cada momento.

El partido galleguista, sin concretar tanto sus posiciones, apoyó ayer la posibilidad de modificar el Estatuto antes del referéndum. A la vista de los acontecimientos, resulta también posible que este último partido lleve el lunes una nueva alternativa intermedia, con la que tratar de que el conflicto salga definitivamente adelante.

Representantes de la mesa de fuerzas políticas gallegas, constituida por el Bloque Nacional Popular Gallego (BNPG) y el Partido Socialista Gallego (PSG), señalaron en una confierencia de Prensa que no ven forma alguna de que el Estatuto de Galicia pueda ser modificado antes del referéndum, y que, en cualquier caso, su voto en la consulta será negativo, como «única manera de acabar con la farsa», según informó Efe.

El presidente de la Unión del Pueblo Gallego, Bautista Alvarez, hizo referencia a los pactos de los comunistas a nivel estatal, y acusó al PSOE de ser el partido que impuso el mínimo del 3% para acceder al Parlamento gallego.