El discurso del presidente

Más concreción es lo que habríamos pedido si hubiésemos tenido la oportunidad de opinar sobre el texto del discurso que el presidente del Gobierno ha pronunciado en el Congreso. (...)Sorprende en él, por de pronto, que, después de exponer los cuatro grandes problemas (la economía, las autonomías, el terrorismo y el internacional), el Gobierno excluya los dos últimos de la petición de confianza. Alega el acuerdo de la Cámara en cuanto a la política antiterrorista. Que contra el terrorismo está el Congreso, ya lo sabemos; ¡faltaría más! Pero ¿tan satisfactoria ha sido aquella política que nada, nada, hace falta modificar en ella, que no se ha puesto de manifiesto la necesidad de otras medidas que habría hecho falta proponer en este debate? En cuanto a la política internacional, la explicación de que se omite en atención a las previsibles discrepancias (entonces se dirá, ¿para qué sirve un debate?), se completa con la referencia a «la específica y concreta coyuntura actual»; entiéndase la conferencia internacional que se está desarrollando en la capital de España. La decisión que ahora tome la Cámara, ¿no quedará en cualquier caso manca por la falta de un problema tan definitorio de la política de cualquier Gobierno como el internacional?

17 de septiembre.