Réplica del director del diario "Sur" a las acusaciones de la izquierda malagueña

El Ayuntamiento y la diputación de Málaga, con la excepción de los miembros de UCD, ha hecho público un comunicado conjunto, en el que informa de las razones por las que ni el alcalde ni el presidente del organismo provincial, ambos socialistas, no asistieron a los actos de protocolo organizados con motivo de la visita al puerto de Málaga de la fragata Libertad, de la República Argentina. La ausencia de una representación oficial de ambos organismos a los referidos actos fue criticada por el diario local Sur, que reprochó al ayuntamiento y a la diputación su actitud en un breve y duro editorial.

Una vez que el Libertad abandonó el puerto de Málaga, los grupos del PSOE, PICA y PSA y los parlamentarios de los mismos partidos hicieron público un comunicado en el que anunciaban su decisión de pedir al ministro de Cultura la destitución de Francisco Sanz Cagigas, director de Sur, al que acusaban de talante antidemocrático y de permitir que en un periódico de propiedad del Estado, que dirige, se publiquen con frecuencia ataques contra la democracia y la Constitución y contra organismos que, como ayuntamiento y diputación, son parte integrante del mismo Estado.En su edición de ayer, el diario Sur publicaba una carta del director a los lectores en la que el señor Sanz Cagigas salía al paso de las acusaciones de que había sido objeto. «Creo yo que esas delirantes y retorcidas acusaciones que se me hacen deben ser probadas para que puedan ser tomadas en serio. Que se diga sin circunloquios cuándo y cómo he atentado grave y casi cotídianamente contra el espíritu democrático que anima a la Constitución. Cuándo y cómo este periódico ha vertido comentarios y frases en las que no se acepta la forma democrática aprobada en la Constitución».

Por su parte, el comunicado conjunto del ayuntamiento y diputación, que fue publicado también ayer en Sur, dice, entre otras cosas: «Evitamos calificar, por creer que no nos corresponde mientras representemos a la ciudad y a la provincia, el régimen político argentino actual, pero dejamos constancia de que en nuestra decisión tuvimos presente la implicación de la propia fragata y de algunos de sus oficiales en tristes sucesos incompatibles con el respeto a la vida humana». Tras agradecer las manifestaciones de apoyo recibidas a su actitud, el comunicado concluye diciendo: «Respetamos profundamente cuantas opiniones adversas hemos recibido o se han producido en la ciudad e incluidas las contenidas en el diario Sur; lo que consideramos inadmisible es que desde un periódico del Estado se promueva una campaña contra la decisión de dos corporaciones integrantes del mismo Estado, y que ese mismo periódico (que, para mayor escarnio, se permite apelar al sentimiento de cortesía contra la que continuamente atenta) recurra al insulto personal y al vocerío en unos momentos y en un tema en que sus responsabilidades constitucionales le debían haber obligado más que nunca a la serenidad».