El PSOE exige un compromiso de interpretación sobre el Estatuto gallego

Un compromiso de interpretación y desarrollo que permita equiparar el Estatuto gallego a los aprobados en Euskadi y Cataluña es la principal de las exigencias formuladas ayer en el transcurso de una conferencia de prensa celebrada en Santiago por la recién elegida ejecutiva del Partido Socialista de Galicia-PSOE, como paso previo a cualquier negociación con UCD. «Para nosotros», dijo el nuevo secretario general, Francisco Vázquez, «sería un gran pesar el tener que oponernos a un desarrollo de la Constitución que afecta a la autonomía de Galicia, pero si UCD se mantiene en su postura, defenderemos el no hasta las últimas consecuencias.

Una charla con los informadores, que en apariencia reunía todos los ingredientes de una presentación en sociedad, sirvió de pretexto a los nuevos dirigentes socialistas para recalcar una vez más que la postura negativa del partido hacia el Estatuto no ha variado tras el congreso extraordinario. «Nuestra actitud», insistiría Vázquez, «es la misma que en diciembre de 1979: el PSOE es un partido autonomista y, en consecuencia, tiene que votar no a este Estatuto tal como está».Ceferino Díaz, vicesecretario general y nuevo hombre clave del PSOE gallego, daría a entender, sin embargo, que la negociación es posible bajo determinadas condiciones y siempre a iniciativa de UCD. Condiciones que incluirían la propuesta de contactos públicos y directos de cara a un compromiso político de interpretación y desarrollo del Estatuto más allá de la conflictiva disposición transitoria tercera. El desarrollo del texto estatutario habría de hacerse mediante un proyecto de ley que el PSOE presentará en cualquier caso si no llega a producirse la negociación y posterior acuerdo.

Al contrario del Partido Galleguista, que ha fijado el 31 de agosto como fecha límite para las ofertas negociadoras de UCD, la ejecutiva del PSOE gallego piensa que el problema no es de plazos, sino de voluntad política. «Aunque, como es lógico», precisó Díaz, «UCD deberá decidirse cuanto antes, porque el tiempo juega en contra».

El secretario general, Francisco Vázquez, negó las acusaciones de centralista dirigidas al PSOE con ocasión de su reciente congreso gallego. «El partido», dijo Vázquez, «no es centralista, sino solitario, lo que lo diferencia precisamente de los nacionalistas gallegos». Vázquez criticó al PNV y a su ausencia en las votaciones de la ley sobre Modalidades de Referendos, y ejemplificó las actitudes, a su juicio insolidarias, de unos partidos que, como los nacionalistas, «se acaban en los límites de su comunidad».

El nuevo secretario general eludió toda referencia al pretendido triunfo de una línea nacionalista en el interior del PSOE gallego. «Vivimos», dijo, «una etapa de maniqueísmo político que nos lleva a hablar de moderados y críticos o de nacionalistas y centralistas. Nada de esto ocurre en el PSOE, donde nacionalismo y socialismo no están separados, sino que forman parte de un proceso conjunto». Para precisar esta valoración aún más, el vicesecretario general, Ceferino Díaz, llegaría a afirmar que la nueva ejecutiva coincide en asumir la realidad nacional gallega desde una perspectiva de clase a partir del socialismo tradicional.

Tanto Díaz como Vázquez negaron, finalmente, que el posible reforzamiento de las tendencias nacionalistas en el PSOE pudiera beneficiar a la izquierda galleguista, que, a su juicio, se opone no sólo al Estatuto, sino a todo el proceso autonómico y a la misma Constitución.