El virtual acuerdo Alfa Romeo-Nissan aleja las posibilidades de que la empresa japonesa entre en Seat

La virtual aprobación por el Gobierno italiano de los acuerdos Alfa Romeo-Nissan Motor Co., de Japón, ha reducido las ya escasas posibilidades de que la japonesa de automóviles sustituya a corto plazo a la Fiat italiana en Seat. Por el contrario, el fracaso del acuerdo entre Toyota y la Ford norteamericana puede ser un elemento estimulante para que la compañía japonesa muestre un mayor interés por la primera empresa española de automóviles de turismo.Aunque los directivos de las dos compañías de automoción más importantes de Japón mantienen un silencio hermético al respecto, los dos acontecimientos señalados van a tener un impacto decisivo en el mercado mundial del automóvil, pueden condicionar el marco de decisiones que tendrán que adoptar en los próximos meses en el mismo y, desde luego, tendrán un efecto importante en el futuro y la solución de Seat.

El acuerdo Nissan-Alfa Romeo, al que una comisión interparlamentaria italiana ha dado su visto bueno, tiene que ser todavía aprobado por el Gobierno italiano. Pero en medios internacionales del autorrióvil se considera que, pese a las presiones de Fiat, el acuerdo será virtualmente ratificado. De ser así, Nissan podrá fabricar hasta 70.000 automóviles en Italia, que, en un primer paso, llevarán motores Alfa Romeo.

Con esta operación y con la culminada el pasado enero entre Motor Ibérica y Nissan, la segunda firma japonesa del automóvil tiene cubierto por ahora el mercado europeo de automoción, con excepción de los camiones pesados. Aparte del acuerdo con Alfa Romeo para vehículos de turismo, Nissan comenzará pronto a fabricar furgonetas y vehículos todo terreno en España con destino al mercado europeo. Directivos de Nissan y Motor Ibérica anunciaron esta semana en Tokio que la fabricación de los modelos que estarán en el mercado en 1982 representará una inversión de 2.500 millones de pesetas, que los japoneses piensan cubrir casi en su totalidad, si es que socios españoles de Motor Ibérica no lo hacen; esto significaría, de confirmarse este extremo, que el porcentaje de participación de Nissan en Motor Ibérica subiría por encima del 36% y alcanzaría una mayor participación.

Aparte de estos dos primeros productos, y siempre que las actuales restricciones del mercado español y europeo se reduzcan, no se descarta que Nissan ensanche el campo de operaciones en Europa y amplíe las actuales instalaciones de Motor Ibérica. Fuentes informativas aseguran que Motor Ibérica está estudiando la posibilidad de ampliar su base aragonesa si el mercado absorbiera rápidamente la producción de 45.000 vehículos (furgonetas y todo terreno) que tiene proyectada en principio.

Antoñanzas no contactó con Nissan

En cuanto al futuro de Seat, su presidente, Juan Miguel Antoñanzas, mantuvo conversaciones en Tokio con los dirigentes de Toyota, en su viaje del pasado mes, pero, al parecer, se abstuvo de tenerlos con los de Nissan. Eso es, al menos, lo que aseguran portavoces oficiales de Nissan, aunque reconocen que los hubo hace más de cuatro meses.Aunque no se descarta que estos contactos puedan renovarse pronto, no parece muy probable que conduzcan a algo efectivo a corto plazo.

Según estiman especialistas del mercado del automóvil, por el contrario, la negativa de la Ford Motor Company norteamericana al acuerdo ofrecido por Toyota para una colaboración en el campo de los automóviles pequeños puede orientar a ésta hacia otras soluciories, basadas en una sola premisa: crecer. Según fuentes informadas, Toyota no ha dicho que no a Seat, aunque se asegura que ha puesto unas condiciones muy fuertes para hacerse con la firma española.