_
_
_
_
Reportaje:

Kubala empañó su historial en los tres últimos años

Con diez años y ocho meses en el cargo, Kubala es el seleccionador nacional que más tiempo ha perdido en este puesto. El suyo ha sido un ejemplo de cómo un hombre puede llegar a quemarse. Tras varias campañas con nota discreta o buena, entró en barrena con ocasión del Mundial y en sus últimos partidos ha acumulado numerosos fracasos. De dieciséis derrotas, diez se han traducido en los tres últimos años.

Más información
Los internacionales de Kubala

Kubala nació en Budapest el 10 de junio de 1927. Jugó en el Ganz y el Ferencvaros, en el Slovan Bratislava checoslovaco y en el Vasas, otra vez en Hungría. Huyendo del régimen socialista de aquellos países, se trasladó a Italia, donde jugó en el Pro Patria y el Hungaria. Tras algunos problemas, que incluyeron la estancia en un campo de concentración, fichó por el Barcelona, club en el que cubriría una larga y feliz etapa, que incluyó cuatro títulos de Liga y otros tantos de Copa, más una Copa de Ferias. Después pasó al Español, donde se retiró. Fue internacional por Hungría, Checoslovaquia y España. Con la camiseta española jugó diecinueve partidos.Como entrenador, antes de hacerse cargo de la selección. dirigió al Barcelona, Murcia, Español, Elche, Zurich, Toronto y Córdoba. Sólo podía presumir de un discreto historial corto de éxitos cuando fue designado para el cargo de seleccionador nacional. España había fracasado en su intento para clasificarse para el Mundial de México y acababa de sufrir una inexplicable derrota ante Finlandia. El trío seleccionador Muñoz-Artigas-Molowny (entrenadores del Madrid, Barcelona y Las Palmas, los tres equipos mejor clasificados del momento) habían sido designados como solución de emergencia para sustituir a Toba, y se despidieron con esa derrota.

Inicios prometedores

El primer partido de Kubala, el 15 de octubre de 1969, fue un desquite sobre Finlandia, a la que España batió por 6- 1. Aquel partido fue el último de Gento en la selección, con los 36 años ya cumplidos. Tras ese encuentro llegaron varios éxitos, como una clara y brillante victoria sobre Alemania en Sevilla y otra sobre Italia en Cagliari. Kubala lanzó la expresión de «Equipo España», creó un grupo unido de jugadores y dotó a la selección de un ambiente alegre que casi nunca había tenido. Consiguió de la federación elevadas primas para los internacionales y los aficionados de toda España volvieron a vibrar en torno a la selección. Incluso los entrenamientos, a los que Kubala se presentaba con vistosos Jerseis y lucía su extraordinario toque de balón en lanzamientos a los porteros, eran seguidos con entusiasmo.Pero los resultados le acompañaron más a Kubala en los partidos amistosos que en los de competición. El equipo no consiguió clasificarse para la fase final de la Eurocopa-72 ni para la del Mundial-74. El derecho a estar en este último lo defendió hasta el partido de desempate contra Yugoslavia, pero fracasó. En la siguiente Eurocopa superó la fase de. grupo, pero cayó en cuartos de final ante la República Federal de Alemania, y para el Mundial-78 consiguió por fin clasificar al equipo.

El hundimiento

Con el Mundial de Argentina comienza el declive de Kubala. Cada vez se le ve más nervioso, varía la alineación, acusa a Pirri de la derrota ante Austria... El fracaso es lógico. Por primera vez se hace numeroso el grupo de aficionados que piden su dimisión. El elevado número de jugadores utilizados una, dos o tres veces y olvidados por él una vez que han sido traspasados por su equipo de origen hace .despertar sospechas. En la nueva fase de clasificación de la Eurocopa, España gana en Yugoslavia y empata en Rumanía, con lo que se pone a un paso de la clasificación. Pero la posterior derrota ante Yugoslavia, que coincide con otros fracasos en partidos amistosos, hace temer incluso que España no sea capaz de ganar a Chipre, condición necesaria para remachar la clasificación. Consigue la victoria y se clasifica.Pero España va a Italia sin fe, y el propio Kubala delata su falta de interés cuando, en vísperas del primer partido, anuncia que ya ha decidido dejar la selección el 30 de este mes (día en que, finaliza su contrato) y que ficha por el Barcelona. Casi simultáneamente, el Barcelona ficha a dos de los internacionales concentrados, Quin¡ y Alexanco. En los tres partidos de la fase final hace lo que venía haciendo desde meses atrás: altera caprichosamente la alineación. Hay ratos de buen fútbol, pero queda la impresión de que cuando el equipo funciona es por la calidad de sus hombres, por ráfagas de inspiración, pero no porque exista un equipo armado por un entrenador consciente. Un empate y dos derrotas despiden a Kubala. Su historia¡ como seleccionador, bueno hasta el año 1977, se ha empañado en los tres últimos, en los que ha sumado diez derrotas.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_