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Gato Barbieri y Art Blakey, en el próximo Festival de Jazz de San Sebastián

Este país nunca ha sido muy dado a los festivales que no fueran la culminación de la horterada internacional, sobre todo en el terreno, más bien tundra siberiana, de la música. Y, a pesar de ello, cuatro, a veinticinco, o cincuenta locos siguen sin enterarse de nada y montan ilusionadamente sus tinglados, como, por ejemplo, el Festival de Jazz de San Sebastián. Quince ediciones se cumplirán con la que comienza el día 23 de julio, para finalizar el 27 del mismo mes.

Como siempre, el Centro de Atracción y Turismo de la ciudad emprende una aventura que goza de escasos apoyos, por no decir ninguno. Ni siquiera la segunda cadena de RTVE es capaz de moverse para ofrecer alguno de los grandes conciertos que allí pueden tener lugar, ya que este festival (como en su momento el de Sitges) sólo era contemplado por la institución como un medio de promoción turística, y ya se sabe que Euskadi no está para nada.El día 23 comienza la proyección de películas, que tiene lugar en las salas de cultura CAM y CAP, para después acudir al Palacio de los Deportes, donde comenzará el concurso de grupos amateurs. Este concurso solía hacerse antes en la bellísima plaza de la Trinidad, pero factores de mayor peso que un buen ambiente lo trasladaron de sitio.

El día 24 habrá música, se supone que semiimprovisada, en el quiosco del bulevar, y ya por la noche, la entrega de los premios a los amateur, seguida de un concierto a cargo de la orquesta de Duke Ellington, dirigida por Mercer Ellington. No sólo es un homenaje a El Duque, es que además la orquesta sigue sonando igual de bien.

El día 25 habrá un concurso de grupos aficionados del País Vasco. Por ahora son sólo cinco, pero está bien que se promocione a los grupos propios. Después habrá más jazz en el quiosco, y luego, concierto de profesionales, a cargo del trío de Carmen McRae y, sobre todo, del quinteto de Freddie Hubbard, hombre este que parecía no encontrarse a sí mismo durante gran parte de los setenta, hasta que junto a Tony Williams, Wayne Shorter, Ron Carter y Herbie Hancock formó parte del VSOP, grupo en el que se mostró, una vez más, como uno de los mejores trompetistas de ahora mismo.

El 26 de julio, y siempre en el Palacio de los Deportes, tocará Gato Barbieri, saxofonista argentino que lo mismo puede dar una de disco music como un rato de free o sus conocidos cócteles jazz suramericanos. Ya se verá, aunque, eso sí, toca siempre mucho, más bien muchísimo.

Y para cerrar el festival, un verdadero acontecimiento: Art Blakey y su Big Band. Blakey, batería, es conocido, sobre todo, por su eterno y siempre renovado grupo los Jazz Messengers, lo cual no impide que haga sus pinos con las orquestas.

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