Tarancón recibió a los dirigentes de la guardería Pulgarcito

El cardenal arzobispo de Madrid, Vicente Enrique Tarancón, recomendó ayer a los directivos de la guardería Pulgarcito, del barrio de San Blas, que dialoguen con el consejo parroquial Virgen del Mar, del que depende el centro, para buscar conjuntamente una salida al conflicto. Para ello, la próxima semana se celebrará una reunión a la que asistirán padres, educadores y consejo parroquial, con el fin de negociar una solución definitiva.El problema de fondo de la guardería Pulgarcito reside en que la propiedad del local, el consejo parroquial. Virgen del Mar, no está de acuerdo con la educación progresista que se les da a los niños (todos menores de seis años) y exige que se imparta una enseñanza con un ideario cristiano, de acuerdo con lo que se refleja en el Estatuto de Centros Docentes. Esto traería consigo la salida automática de parte de los educadores actuales. La postura que sostiene un importante número de padres y profesores es que los niños no deben recibir, por el momento, ninguna clase de ideario ni adoctrinamiento de ningún tipo.

Esta diferencia de criterios se hizo ya patente en 1976, fecha en la que padres y educadores empezaron a hacer público el problema. El conflicto ha estallado durante los últimos meses, porque la parroquia ha anunciado su intención de no renovar el contrato al equipo de profesores de la guardería, contrato que se cumple el próximo día 1 de agosto.

La reunión que se celebrará la próxima semana para solucionar el tema ha sido convocada por el vicario general de la diócesis Madrid-Alcalá, José María Martín Patino, quien ha invitado a todas las partes discrepantes. En caso de que los afectados no lleguen a un acuerdo, el arzobispado podría llegar a decidir si continúa o no la guardería Pulgarcito y en qué condiciones se seguirá impartiendo la educación a los niños que a ella asisten.