¿Legalizar los atracos?

Aunque me dicen que ustedes sólo publican las cartas que coinciden con su línea ideológica, remito ésta para expresar mi desacuerdo con su editorial del día 25 y mi acuerdo con el diputado Díaz Pinés. El autor del editorial se olvida que hay votantes de UCD que deseamos defender la indisolubilidad del matrimonio y tenemos derecho a no ser considerados «gente ligeramente estrafalaria». El fanático editorial de su periódico no está inspirado en ningún estudio serio del problema.A mí, sin necesidad de exhibir mi condición de católica, las ideas de Díaz Pinés me parecen claramente transferibles a cualquier persona, sea o no religiosa. Si, como algunos sostienen, no hay ninguna norma superior a la que el hombre pueda darse a sí mismo (es decir, una ley natural), no veo razón para no legalizar la droga y los atracos. Los defensores del divorcio lo hacen porque dicen que son muchísimos los casos de matrimonios que no funcionan, luego eso significa que si no fueran tantos, los divorcistas no se preocuparían; o lo que es lo mismo: si la repetición de casos anormales se eleva al rango de norma para legalizar la figura del divorcio, lo mismo debería hacerse con los atracos, que son muchos más. /