El partido extraparlamentario más influyente de Andalucía, al borde de la ruptura
La crisis abierta hace unos meses en el Partido de los Trabajadores de España (PTE) está teniendo una repercusión especial en Andalucía. Aunque en esta región es también un partido extraparlamentario y minoritario, su influencia municipal y sindical es considerable y se sitúa en las zonas más explosivas de toda Andalucía (sur de Sevilla, sierra de Cádiz y diversas zonas concretas de Córdoba, Granada, Huelva y Málaga). Por otra parte, Andalucía, junto con Aragón, son las regiones en las que el PTE tiene una mayor presencia.
Cuando Eladio García Castro comenzó a exponer dentro del PTE su teoría de la creación de colectivos radicales, en Andalucía, con el secretario general del Partido del Trabajo de Andalucía (PTA) a la cabeza, Isidoro Moreno, se desarrolló una fuerte contestación, llegando a dividir al partido en dos bloques: uno partidario de las tesis de Eladio García Castro, con Antonio Zoido a la cabeza, que cuenta con un 40% del PTA. Y otro capitaneado por el propio Isidoro Moreno, que cuenta aproximadamente con el 60% del partido. En este caso no se da la división general que se realiza en todo el Estado dentro del PTE, ya que el sector proveniente de la Organización Revolucionaria de Trabajadores (ORT), a cuya cabeza está el concejal onubense Juan Seada, apoya las tesis de Isidoro Moreno. Estas consisten fundamentalmente en la existencia de un partido nacionalista andaluz marxista-leninista. Este sector se quedaría con las siglas PTA, ya que están registradas a nombre de Isidoro Moreno.El sector de Antonio Zoido formaría un colectivo radical a imagen de los que se creen en el resto de las nacionalidades y coordinado con ellos, siguiendo las propuestas de Eladio García Castro.
La solución, en junio
El 31 de mayo y 1 de junio se va a celebrar el consejo del PTA, en donde se presentarán dos ponencias, la de estatuto y la ideológica, una por cada sector, formalizándose así la ruptura. El sector de Isidoro Moreno radicalizará su nacionalismo al perder el vínculo con la organización del Testo del Estado (este sector no tiene la más mínima relación con el que a nivel estatal está en torno a José Sanroma y la antigua ORT).Esta crisis está teniendo un reflejo a nivel municipal en la veintena de ayuntamientos que controla el PTA o las candidaturas auspiciadas por éste. En la provincia de Cádiz, tan sólo en Puerto Real son partidarios de las tesis de Eladio García Castro y Antonio Zoido al menos el alcalde, José Antonio Barroso, y el portavoz en el pleno de la corporación, Diego Luis Moreno. En Paterna y Bornos apoyan al sector de Isidoro Moreno, así como en Villamartín. En el resto de Andalucía, Lebrija (Sevilla) y Estepona (Málaga) apoyan al sector isidorista, y Motril (Granada) y Morón (Sevilla), a Antonio Zoido, en lo que se refiere a los ayuntamientos más importantes.
La crisis tiene también cierta repercusión a nivel sindical: el Sindicato Obrero del Campo (SOC), con su secretario general al frente, Francisco Casero, decidió en su último congreso suspender toda relación con el Sindicato Andaluz del Campo (SAC) y el PTA. De todas formas, parece ser que el SOC apoya en cierta medida al grupo de Isidoro Moreno, aunque este extremo no parece estar muy claro. Lo cierto es que en los ayuntamientos controlados por este partido la situación es difícil, y mucho peor en los que los cargos principales están simultaneados con los del SOC. El problema puede complicarse más aún si la ruptura es demasiado fuerte, ya que la ley faculta a los partidos a cesar a sus concejales y las siglas permanecerán del lado isidorista.
A todo este panorama hay que añadir la postura del PSA, que parece dispuesto a admitir en su seno al sector isidorista. Antonio Ibáñez, secretario provincial de este partido, ha asegurado a EL PAÍS: «Es necesaria la existencia de un partido andaluz mayoritario, donde haya personas que vayan desde la izquierda moderada a la izquierda radical. Es decir, tenemos las puertas abiertas al sector de Isidoro Moreno, persona que siempre ha demostrado una gran honestidad política».
Esto puede complicar las cosas, ya que dentro del grupo de Isidoro Moreno hay diversas posturas en torno a la posible integración en el PSA, aunque parece cierto que entre su política de alianzas mantengan una atención especial al partido andaluz.
Este problema también se plantea a nivel sindical. Parece ser que Francisco Casero y el SOC están dispuestos a integrarse en el futuro sindicato nacionalista andaluz, la Confederación Sindical Andaluza (CSA), auspiciado en cierta manera por el PSA. La postura del sector isidorista parece ser proclive a entrar en esta operación.
Crisis también en el PT aragonés
La crisis que desde hace meses sufría el Partido de los Trabajadores de Aragón (PTA), ha culminado con la destitución de su órgano de dirección, el comité central de Aragón, y la ruptura con el PTE nacional. Dichos puntos fueron acordados en una asamblea general de militantes, en donde también se fijó la convocatoria de un congreso asambleario del PTA, a celebrar los días 28 y 29 de junio. El congreso, informa Rosa María Artal, tratará de abordar los problemas planteados y la necesaria homogeneización de la línea política
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