Dirigente del IRA afirma que su organización está aliada con ETA
Un dirigente del Ejército Republicano Irlandés (IRA), identificado con el alias de Patrick afirmó que su organización está aliada con los terroristas españoles de la ETA, en una entrevista publicada por el semanario alemán Der Spiegel.Por su parte, el semanario italiano Panorama publicó ayer un reportaje dedicado a lo que denomina la «transnacional del terrorismo» y las vinculaciones de los distintos grupos europeos. Tras afirmar los lazos de las Brigadas Rojas con el IRA y terroristas alemanes, la revista asegura que los «brigadistas» no pudieron entrar en contacto operacional con ETA a través del IRA, pero sí consiguieron unas relaciones sólidas con los Grapo, después de una reunión celebrada en Barcelona, en octubre de 1978, entre representantes de las Brigadas Rojas, llegadas de Génova, y los miembros del Grapo Juan Antonio Eizaguirre e Isabel Laquet.
Según Panorama, en aquella reunión se acordó el intercambio de armas y refugios entre ambas organizaciones. En la primavera de 1979, las Brigadas Rojas compraron a un traficante de Niza ochenta metralletas checoslovacas, cincuenta de las cuales fueron revendidas a los terroristas españoles por diez millones de pesetas.
El semanario aporta una prueba más de la interrelación entre ambos grupos con el descubrimiento en Palma de Mallorca de un piso franco con propaganda de las Brigadas Rojas, el Grapo y la ETA.
En este sentido, la semana pasada la policía francesa detuvo a una treintena de presuntos terroristas de Acción Directa, entre los cuales se dijo que se encontraban miembros de las Brigadas Rojas y dos españoles.
Por lo que respecta a la entrevista con el dirigente del IRA, éste afirma que, al margen de la alianza con la ETA, su organización no tiene conexión con otros grupos armados, como la Fracción del Ejército Rojo alemán.
La versión de Panorama en este punto difiere. El semanario afirma que la «transnacional terrorista» fue propuesta por la Baader-Meinhof alemana y ya está en funcionamiento, conclusión a la que llegan los servicios antiterroristas de los países afectados: Irlanda Italia, España, la República Federal de Alemania y Francia.
