Detención de la disidente rusa Malva Landa
Malva Landa, de 58 años, cofundadora del Grupo moscovita de Aplicación de los Acuerdos de Helsinki en la URSS, fue detenida, el pasado día 7, en VIadimir, cerca de la capital, acusada de «difundir calumnias antisoviéticas» y pasar a Occidentes documentos también «antisoviéticos», como los interrogatorios de varios juicios de disidentes.Hace algo más de dos años las autoridades la confinaron en la ciudad de Petushki, a cien kilómetros de Moscú.
Fundadora, en 1976, del Grupo Helsinki, junto al físico Yuri Orlov, una de las figuras de la disidencia más conocidas, en la actualidad recluido en un campo de trabajo en Perm, dirigió, en febrero de 1977, el fondo de ayuda económica a los familiares de los presos políticos, junto a Tatiana Kodorovich (hoy exiliada) y Criob Liubarski.
Malva Landa fue objeto de un extraño juicio a finales de ese año, a raíz de un misterioso incendio en su «recinto» (dentro de un apartamento comunal en Moscú), en el transcurso del cual perdió todos sus enseres. Cuando la historia pareció olvidada, un vecino la denunció por daños a su «recinto» y fue acusada por «daños voluntarios contra la propiedad pública y privada» en base a los artículos 99 y 55 de Código Penal de la URSS.
La nueva acusación contra Malva Landa podría reportarle, a menos, tres años de cárcel. Las medidas contra la disidente se inscribirían tanto en la represión global anunciada recientemente por Andrei Sajarov como las medida concretas de las autoridades soviéticas para desmantelar los di versos grupos Helsinki que funcionan en la URSS, siendo el de Kiev (Ucrania) el más perseguido en lo últimos meses.
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