Amenazas de bomba obligan a cerrar un instituto

Desde hace una semana, los alumnos del Instituto Conde de Orgaz, en el barrio de Canillas, han visto continuamente interrumpidas las clases por las diarias amenazas de bomba que se reciben telefónicamente en el centro.La primera amenaza telefónica se produjo el pasado martes. Ese día dijeron que «cualquier día laborable estallaría una bomba entre las siete de la tarde y las once de la noche». Los días siguientes, comunicantes que decían pertenecer a la organización Fuerza Joven, volvían a repetir la amenaza.

Tanto la dirección del centro como los padres de los alumnos han denunciado el caso a la comisaría del distrito y al Gobierno Civil, aunque hasta el momento las alarmas resultaron infundadas. De todas formas, lo que sí han conseguido los autores del terrorismo telefónico es que los 1.650 alumnos que asisten a los turnos de mañana, tarde y noche no puedan dar sus clases con normalidad, ya que, como medida de precaución, las aulas son desalojadas en cuanto se recibe la primera llamada.

Los alumnos del instituto y la asociación de padres manifestaron a este periódico su disconformidad con la atención prestada por la policía, ya que, según aseguran, no solamente no han facilitado vigilancia especial, sino que el único registro realizado fue hecho de forma-visual, sin que se desplazaran equipos de artificieros.