Atracador herido muy grave por el disparo de un compañero

Un atracador resultó gravísimamente herido, el pasado martes, a consecuencia del disparo que hizo su cómplice cuando ambos trataban de cometer un asalto en la floristería Pérez Santos, de la calle del Sauce, en el distrito de Chamartin. El propietario del establecimiento sufrió lesiones leves en el transcurso del forcejeo que precedió al disparo. El atracador herido es el delincuente habitual Anastasio Mateo Gaitano, de veinticinco años.

Poco antes de las nueve de la noche del martes, el florista Pérez Santos, a quien acompañaba un ayudante, se disponía a echar el cierre al local después de una jornada sin sobresaltos. Una vez en el exterior, se le acercaron dos hombres jóvenes, que le exigieron la entrega del dinero que hubiese recaudado. La víctima declaró ayer a EL PAÍS que inicialmente aquello le pareció una broma. «Jamás me había visto en una situación semejante, así que en los primeros segundos no llegué a creerme que estuviera ante unos atracadores.» Los dos hombres cambiaron inmediatamente de actitud; extrajeron dos armas de fuego y con una de ellas golpearon al señor Pérez Santos.La seguridad de que los dos delincuentes estaban dispuestos a todo hizo pensar rápidamente al dueño de la floristería. «Pensé que si había que pedir auxilio el mejor sitio para hacerlo seria el bar contiguo, que estaba bastante concurrido; así que grité al dependiente que corriera. En ese instante, uno de los asaltantes trató de dispararme, pero, por alguna razón, quizá porque se hubiese encasquillado el arma, no disparó. Yo sufrí un golpe en la frente, donde tengo señalado el cañón.»

El ayudante trató de salir corriendo hacia el bar. Uno de los delincuentes se adelantó para cerrarle el paso, con lo que se situó en la línea de tiro de su cómplice, que acababa de oprimir el gatillo al comprobar que perdían el dominio de la situación. El proyectil atravesó la frente de Anastasio Mateo.

Luego el atracador que había disparado salió corriendo. «Se perdió en una calle muy oscura que está próxima a la floristería. No supimos hacia dónde fue. Además, el hecho sucedió en muy pocos segundos; en medio minuto, tal vez. Luego, en un centro médico, tuvieron que darme siete puntos de sutura en el cuero cabelludo. Tengo, como antes decía, el cañón de un arma señalado en la frente.»

En la ciudad sanitaria La Paz, los facultativos calificaron de crítico el estado de salud de Anastasio Mateo. Al parecer, su companero había huido a bordo de un Seat 127. En el lugar del suceso, la policía recogió un revólver, marca Mayer Anschne, del calibre 38, con cuatro proyectiles en el tambor. También hallaron los agentes un casquillo disparado, de nueve milímetros de calibre.