Asaltante detenido a la puerta de un banco con un botín de medio millón de pesetas

Por segunda vez en un plazo de veinticuatro horas, los servicios policiales antiatraco han logrado neutralizar un asalto perpetrado por tres hombres armados; uno de ellos, precisamente el portador del botín, fue detenido e identificado, y se espera una rápida y total solución del caso. El atracador arrestado se llama Rafael Muñoz Romero.

La entidad bancaria víctima del asalto fue, nuevamente, una oficina del Banco de Bilbao, esta vez la de la calle de Emilio Ferrari, y el desarrollo de los hechos tuvo grandes similitudes con el que ayer se describía en EL PAIS y que culminó con la detención de los cuatro delincuentes. Fuentes policiales aclaraban que las dos claves del casi feliz desenlace del suceso de ayer fueron, como anteayer, la eficacia del nuevo servicio policial antiatracos y la diligencia con que fueron accionados los sistemas de alarma desde la sucursal bancaria.A las 10.45 de la mañana, tres hombres armados entraron en la oficina bancaria y consiguieron que les fueran entregadas 500.000 pesetas. Aunque el hecho se produjo en muy pocos minutos, una unidad de radiopatrulla próxima tuvo el tiempo justo de llegar a la sucursal cuando uno de los asaltantes, precisamente el portador del botín, trataba de escapar. Los agentes lograron reducirle en unos segundos; además del dinero le fueron incautados un revólver y un cuchillo de monte. Al parecer, Muñoz Romero es drogadicto y dedica una cuota diaria de 10.000 pesetas a abastecerse de heroína.

Como ha señalado EL PAIS, el nuevo dispositivo antiatraco ha sido concebido desde una consideración estadística: se ha hecho una selección de zonas especialmente afectadas por los robos a mano armada y se ha destinado a ellas un equipo de unidades cuyas condiciones principales son la maniobrabilidad y la rapidez. Este servicio está conectado a la Dirección General de Seguridad, adonde es enviada directamente una señal eléctrica de alarma desde el banco afectado.