Descubierto un túnel en la prisión de Pamplona

Funcionarios de la prisión de Pamplona descubrieron el pasado día 27 de diciembre un túnel, al parecer iniciado recientemente, a través del cual varios reclusos pensaban fugarse de la cárcel. El túnel fue descubierto durante una de las inspecciones habituales que se realizan en el centro por los funcionarios, y se encontraba tapado con maderas y musgo.

Según se ha podido saber, el túnel era de dimensiones reducidas: un metro de profundidad y medio metro de anchura, si bien, al estar situado en las proximidades de la tapia de la cárcel, únicamente se necesitarían cuatro metros en línea recta para atravesar el muro de la prisión y salir al exterior. El comienzo del túnel fue horadado en un patio interior de la cárcel y estaba cubierto por un entarimado, sobre el que se había colocado musgo para camuflar el agujero. Por orden del director de la prisión de Pamplona se han iniciado las gestiones necesarias encaminadas a aclarar la participación de los actuales reclusos en la construcción del túnel, que fuentes de la Dirección General de Prisiones han calificado de «simple hoyo».

Según informó ayer El Pensamiento Navarro, que cita fuentes próximas a medios penitenciarios, en la construcción del túnel habrían participado varios reclusos, presuntos miembros de comandos de ETA militar, que planeaban efectuar una fuga en una fecha todavía no determinada. En la actualidad, permanecen en la cárcel de la capital navarra diez presuntos etarras, la mayor parte de ellos pendientes de celebración de juicio. En los últimos treinta días, otros seis presuntos miembros de ETA (m) y ETA (p-m) han sido puestos en libertad provisional bajo fianza de 100.000 a 200.000 pesetas, por orden de la Audiencia Nacional de Madrid.

La cárcel de Pamplona data de principios de siglo y está situada en una zona que, en la actualidad, es uno de los puntos de expansión de la capital navarra, por lo que está rodeada de edificaciones. En este sentido, el Ayuntamiento de Pamplona ha manifestado su deseo de iniciar conversaciones con el Ministerio de Justicia, para que se construya una nueva cárcel, fuera del casco urbano de Pamplona, que reúna más condiciones que el establecimiento actual. De esta forma, el solar que actualmente ocupa la prisión podría convertirse en zona ajardinada.