La ciudad de Las Palmas, amenazada de graves restricciones de agua

En la mañana de ayer quedó paralizada, como consecuencia de la falta de fuel-oil, la planta potabilizadora de Las Palmas, planteándose así un grave problema de abastecimiento de agua a la capital de la provincia, que, de no resolverse en los próximos días, podría presentar caracteres drásticos.

Al parecer, la empresa distribuidora del carburante, Disa, había dirigido un ultimátum al Ayuntamiento de la capital para que le abonara los veintidós millones de pesetas que le adeuda desde hace algunos meses, y decidió cortar el suministro de su combustible hasta que no se liquide la deuda.La distribuidora argumenta que su situación es insostenible, porque la compañía CEPSA, que es la productora, viene exigiendo los pagos al contado. Asimismo, recuerda que, independientemente de los veintidós millones de pesetas, el Ayuntamiento de Las Palmas le sigue adeudando unos 46 millones, cantidad sensiblemente inferior a la que adeudaba la anterior corporación en diciembre de 1978, y que se elevaba entonces a 97 millones de pesetas.

La planta potabilizadora tenía desde hace varias semanas un rendimiento muy limitado, a causa de averías en diversas partes de su compleja maquinaria, que precisamente no se habían subsanado por falta de dinero. La situación pues de la planta ya venía siendo excesivamente delicada por falta. de recursos económicos.

Por otro lado, el rendimiento de esta planta ha descendido de tal manera que se ha recomendado el cierre de varios aljibes en los que se depositaba el agua. Esta baja producción coincide con que en la actualidad no existe la menor reserva procedente de la potabilizadora.

En pleno rendimiento, estas instalaciones consumen diariamente 145 toneladas de fuel-oil. Teniendo en cuenta que el Ayuntamiento paga 3.920 pesetas por tonelada, se deduce que la aportación económica municipal por este concepto se aproxima al medio millón de pesetas por jornada.

El consumo actual de la población de Las Palmas -con cerca de medio millón de habitantes- se ha estimado en unos 52.000 metros cúbicos diarios, de los que 8.000 corresponden a la producción de la planta potabilizadora, y el resto se compra a los productores de agua subterránea.

Ni que decir tiene que tanto en los medios municipales como gubernativos no se oculta la preocupación por el tema. Precisamente ayer ya hubo una primera reunión entre el gobernador civil de la provincia y el alcalde de Las Palmas, Manuel-Bermejo, para tratar de encontrar una solución urgente al problema de la deuda con la empresa distribuidora de fuel-oil, y evitar así que un importante sector de la ciudad se quede sin agua a partir de hoy mismo.