El precio oficial del petróleo podría superar los treinta dólares/barril tras la reunión de la OPEP en Caracas

El precio del barril de petróleo podría experimentar un incremento superior al 30% a partir del mes de enero de 1980, como consecuencia de la decisión que adopte en este sentido la conferencia ordinaria de ministros de Energía de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), prevista para el 17 de diciembre en Caracas. El precio del barril de crudo es actualmente, para los contratos oficiales a plazo, de unos 22-25 dólares, y podría superar los treinta dólares en el mes de enero del año próximo, según impresiones recogidas en medios petrolíferos europeos y norteamericanos.

Aunque a nivel técnico el informe que analizarán los ministros de Energía de la OPEP ha sido ya elaborado, medios de la industria petrolífera estiman que la conferencia de Caracas estará dominada principalmente por factores políticos (aquellos derivados de la crisis de Irán) y de la actual tendencia caótica del mercado spot de entrega inmediata, donde los precios superan los cuarenta dólares por barril.En la última reunión de los ministros de Petróleo de los países englobados; en la OPEP, que se celebró en Ginebra a finales de junio, se estableció un doble baremo de precios que indicaba un precio mínimo de dieciocho dólares para el arabian light y otro máximo de 23,50 dólares para los de máxima calidad.

Desde junio, sin embargo, seis países de los trece que componen la OPEP (Nigeria, Libia, Irak, Irán, Argelia y Kuwait) han roto con sus compromisos de entonces y han elevado sucesivamente sus precios, que en algunos casos superan los 23,50 dólares máximos. Como consecuencia, el precio del barril oficial se encuentra ahora en los 24-25 dólares, aunque Arabia Saudí (que produce más que todos los demás juntos) mantiene su precio a dieciocho dólares.

En el último número de la revista Middle East Inteligence Review, sin embargo, fuentes saudíes informaban que Arabia Saudí estaba considerando una modificación unilateral de este precio, incluso antes del encuentro de Caracas. De producirse esta subida, el precio medio del petróleo OPEP se elevaría considerablemente.

La situación del mercado petrolífero está muy enrarecida con motivo de la crisis Irán-Estados Unidos y con la subsiguiente suspensión de la venta de crudos iraní a Washington. Numerosos países consumidores, en un esfuerzo para paliar las consecuencias futuras de esta crisis, han recurrido al mercado spot de entrega inmediata para aprovisionarse del suficiente crudo para los próximos meses, en el caso de acciones políticas por parte de la OPEP. En dicho mercado, el barril ha llegado a costar hasta 45 dólares y su precio actual ronda los cuarenta.

En estos momentos se estima que el mercado mundial de petróleo, contrariamente a la situación del pasado año y primeros meses de 1979, ofrece un difícil equilibrio entre la oferta y la demanda. Algunos medios señalan, incluso, que la oferta supera últimamente a la demanda, sobrando a veces más de un millón de barriles diarios, de una producción OPEP superior a los 45 millones por día.

En estas circunstancias, muchos expertos estiman que la subida que decidirán los ministros de la OPEP, en Caracas, será moderada y que no sobrepasará el 10 %. Pero otros medios indican que, de hecho, esta subida ya se ha producido desde junio y, lo que es más importante, un sector de la OPEP está decidido a reducir la producción con el fin de mantener in crescendo el ritmo de los precios, en base a una oferta de crudo inferior a la demanda.

La diplomacia norteamericana actúa en el golfo Pérsico

Con este fin de evitar reducciones en la producción, el secretario norteamericano del Tesoro, William Miller, inició a finales de la semana pasada una gira por varios países del golfo Pérsico, con visitas a Arabia Saudí y los Emiratos Arabes Unidos.A Riad, capital saudí, el funcionario norteamericano ha llevado el mensaje de que Estados Unidos «verá bien» que se mantenga intacto el nivel de producción diaria saudí, estimado actualmente en 9,5 millones de barriles. En este país, principal suministrador de petróleo extranjero a Estados Unidos, después de Nigeria, Washington parece querer aprovisionarse de esos 700.000 barriles extras al día que pierde con la situación iraní.

Aunque Arabia Saudí ha colaborado siempre con las peticiones occidentales para mantener el actual equilibrio entre oferta-demanda en el mercado del crudo, fuentes petrolíferas estiman que la crisis iraní será un factor psicológico de enormes repercusiones políticas en la reunión de Caracas. En este sentido, las presiones de los países árabes más radicales, propensos a mantener intacto su nivel de ingresos por la vía de los aumentos de precios, y no por el de la producción, podría cambiar las previsiones optimistas del encuentro de Caracas.

Modificación en el sistema de pagos

En cualquier caso, la certeza de un aumento en los precios de los crudos parece desprenderse de las recientes reuniones de los técnicos de la OPEP, que han elaborado ya el informe confidencial que se presentará en la capital venezolana para negociación de los ministros. Del contenido de dicho informe se sabe poco, pero no se descarta que lleve recomendaciones para un incremento de los crudos y, por el lado financiero, de una propuesta formal para que se sustituya el dólar como método de pago del crudo. Esta última recomendación iría en función de las fluctuaciones a la baja del dólar y, en cierto modo, de las nuevas presiones políticas que se esperan del régimen de Jomeini en Irán.Otra de las modificaciones que, en el sistema de pagos y entregas, podría decidir la OPEP en Caracas sería la introducción del concepto de «certificado de destino» en las ventas de crudo a las compañías. Este certificado sería exigido para las ventas a países del Tercer Mundo y perseguiría evitar la canalización de crudos con destino a países no industrializados a los desarrollados.