Horas extraordinarias /1

En estos momentos TVE produce, del total de programas que emite, tan sólo informativos, musicales, culturales (segunda cadena en particular, y casi exclusivamente diálogos, cuando no monólogos), teatro y algún que. otro magazine. La semana que viene emitirá once horas de cine, catorce horas de telefilmes, tres horas con 45 minutos de dibujos animados y un mínimo de una hora con veinte minutos de programas culturales. Más de treinta horas de Frogramas de entretenimiento y ficción, de los que TVE ni siquiera ha producido un minuto (los 20-25 minutos de dibujos animados de Don Quijote son, en principio, de una productora española privada).Los directivos de TVE no con ceden importancia, sin embargo, a la hegemonía de programas extranjeros en los distintos subgéneros de entretenimiento. La dirección de Medios Técnicos y Operación de TVE, en un documento de uso interno fechado el 21 de septiembre de este año, se pregunta y propone: «¿Vale la pena forzar las cosas al nivel actual Fiara mantener determinado porcentaje de producción propia en el esquema? ¿Podría incrementarse el porcentaje de producción ajena para dar tiempo a formar un stock suficiente de espacios de producción propia que permitan programar con mayor tranquilidad? ¿Mantener los programas en directo en fin de semana compensa la distorsión laboral que producen?» (TVE ya no emite el último telediario, Noticias, ni sábado ni domingo, hecho que supone una grave anomalía e incumplimiento de su obligación de informar; actualmente se emiten en directo, los fines de semana, además de telediarios, Fantástico y La clave). «¿Debe TVE producir, por razones de prestigio, programas como Fortunata y Jacinta o La vida de Cervantes?»

El párrafo pertenece al informe confidencial titulado Análisis de las causas que generan horas extraordinarias y posibles soluciones al problema. Informe en el que, p r primera vez, aunque con carácter reservado, los directivos reconocen la persistencia de corruptelas y falta de organización entre los distintos sectores de dirección, y que esos males inciden directamente en la programación y emisión. En otras palabras, TVE quiere incrementar la programación de productos ajenos, para evitar el desgaste que provoca el pago de horas extraordinarias, cuyo volumen económico parece escandalizar ahora a los propios directivos. Aunque la finalidad última de TVE es producir programas y emitirlos, se opta por disminuir el volumen de programación propia, para salir al paso de los males de una gestión económica, cuyas consecuencias gravan sobre la calidad de los productos y, en definitiva, sobre la audiencia y contribuyente.

El organismo autónomo RTVE presupuestó en 1977 la cantidad de 678 millones de pesetas para el abono de «horas extraordinarias y libranzas». En realidad, RTVE abonó 736 millones de pesetas, debido a un error o desvío de 58 millones de pesetas por parte de los responsables del presupuesto. En 1978, ya con Fernando Arias Salgado como director general, el capítulo para horas extraordinarias se elevó a 985 millones de pesetas, y para 1979 se solicitaron 736 millones de pesetas (601 millones para TVE y doscientos millones para RNE).

Desde el pasado mes de junio -según hoja informativa dada a conocer por UGT-, el coste de una hora tipo extraordinaria para el nivel más bajo (noveno) y más alto (primero) es, respectivamente, el siguiente: 595 y 976 pesetas, para la primera y segunda hora; 655 y 1.074, para las sucesivas; 794 y 1.032, para las nocturnas, y 953 y 1.562 pesetas para cada hora festiva (sábados y domingos).