Teniente coronel gravemente herido al ser ametrallado en San Sebastián

El teniente coronel de Infantería Tomás López de Diego resultó herido de suma gravedad, a primeras horas de la mañana de ayer, al ser ametrallado por dos jóvenes en el barrio donostiarra del Antiguo. El miércoles se había recibido, al parecer, una llamada anónima en el cuartel de Irún, en la que se informaba que en las próximas horas se iba a producir un atentado contra una autoridad militar.

A las siete y media de la tarde de ayer se celebró en San Sebastián una manifestación silenciosa, convocada por el PSOE, PCE, CCOO y UGT, para protestar por este nuevo acto de violencia terrorista, que fue condenado por las citadas organizaciones.El atentado se produjo cuando el teniente coronel Tomás López se encontraba, a las ocho y media de la mañana, en el interior de su vehículo, realizando las maniobras oportunas para sacar el automóvil del patio de la villa Mari Aurori, donde tiene establecido su domicilio. Fue en ese momento cuando dos jóvenes -según algunos vecinos, no superaban los veinte años-, parapetados en lo alto del muro que circunvala la villa, dispararon dos ráfagas de metralleta contra el militar.

Al efectuarse los disparos de arriba abajo, quince-balas se incrustaron en el techo del automóvil y tres proyectiles alcanzaron a Tomás López de Diego. Vecinos del barrio estiman que fueron unas cuarenta las detonaciones oídas, aunque la policía sólo encontró en el lugar del suceso catorce casquillos de bala calibre nueve milímetros Parabellum, marca FS.

Los agresores, una vez realizado el atentado, se dieron a la fuga por el camino que asciende paralelo al muro del parque de Miramar y, una vez recorridos varios metros, continuaron la huida en un automóvil en el que, al parecer, esperaba una tercera persona.

El vehículo utilizado en el atentado fue encontrado, a la una de la tarde, abandonado en una calle del barrio donostiarra de Amara. Más tarde se supo que el automóvil -un Fiat 125, matrícula SS-7691-L- había sido robado a las ocho dnmiembros del comando. El propietario fue interceptado en el céntrico paseo de los Fueros, de San Sebastián, y trasladado hasta la policlínica de esta ciudad, donde le abandonaron, no sin antes advertirle que no diera parte a la policía hasta que transcurrieran tres horas. Un sobrino de la víctima trasladó al herido hasta la Cruz Roja -centro sanitario próximo al lugar de los hechos-, donde el equipo médico que le atiende, tras una larga operación quirúrgica, informó que el paciente sufría lesiones muy graves, al haber sido alcanzado por tres balas en el brazo izquierdo, dos de las cuales fueron a incrustarse en el tórax.

El teniente coronel López de Diego reside en San Sebastián desde hace cuarenta años, y ayer, en el momento del atentado, se dirigia, como todas las mañanas, al cuartel de Loyola, donde desempeña un cargo administrativo como mayor en el regimiento de Cazadores de Montaña Sicilla número 67. Según la biografía facilitada por fuentes militares, Tomás López de Diego nació en el pueblo palentino de: Buenavista de Valdivia hace 56 años, está casado en segundas nupcias y tiene siete hijos, uno de los cuales está afiliado, al parecer, a CCOO.