La teología de Hans Küng
El artículo publicado en EL PAIS el pasado 21 de octubre, donde el célebre teólogo de Tubinga, Hans Küng, analizaba críticamente «un año de pontificado de Juan Pablo II», ha escandalizado a algunos teólogos que están perfectamente dispuestos a hacerle la «corrección fraterna» a Küng y no hacérsela a Juan Pablo II. Uno de estos teólogos acaba de poner verde al autor de ¿Existe Dios? e ¿Infalible?: una pregunta, basando su ataque en el estilo interrogativo de la teología de Hans Küng. En una flagrante contradicción, califica el estilo de Küng de «arrogante». Yo me pregunto sí se puede calificar hoy de arrogante una teología que parte de preguntas y si no lo será más una teología que parte de respuestas. Los defensores a ultranza de la teología tradicional saben muy bien que esta no ha sido uniforme en su historia y que han sido precisamente las preguntas planteadas por los teólogos las que le han hecho avanzar. Y, en cuanto al asunto que nos ocupa, fueron más arrogantes las «críticas despiadadas» que algunos «teólogos anticonciliares» hicieron a Pablo VI (sobre todo por su Populorum progressio) y al concilio Vaticano II, que las críticas hechas por Küng a Juan Pablo II. Aquellas tuvieron el signo de la admiración y de la ira. Estas, el de la interrogación, de la humildad. El signo que habría que poner, precisamente, en cualquier libro de teología. En un mundo como el nuestro, donde apenas quedan cuestiones dogmáticas o morales -ni, por supuesto, políticas- definitivamente cerradas.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.