Suárez descarta la amnistía y la crisis de Gobierno

En forma tajante, y haciendo alusión al atentado que ayer costó la vida a un guardia civil en Portugalete (Vizcaya), el presidente del Gobierno, Adolfo Suárez, descartó ayer, ante un grupo de periodistas, la posibilidad de una nueva amnistía, mantuvo la expectativa sobre una posible gira personal por Vizcaya, Guipúzcoa y Álava y desmintió que en su calendario gubernamental, a corto o incluso medio plazo, figurase una posible crisis ministerial. («Me gusta que los Gobiernos duren.»)

Estos son los principales datos políticos que aporta la primera rueda de prensa concedida por el presidente desde la primavera del pasado año. Adolfo Suárez se reunió en la tarde de ayer, en el palacio de la Moncloa, con una veintena de periodistas de prensa escrita, radio y televisión, sometiéndose a sus preguntas, durante una hora, en presencia del director de su gabinete, Alberto Aza; del secretario de Estado para la Información, Josep Meliá, y de Jesús Picatoste, director general de Relaciones Informativas. Es propósito de la Presidencia recuperar estas reuniones con la prensa, y con cierta periodicidad.La hora off the record del interrogatorio a Suárez se mantuvo en un plano frío. «Pensé que las preguntas serían más agresivas», comentó a su término el señor Suárez, presumiblemente a causa de la infrecuencia de los contactos del presidente con los medios informativos. Durante este período de la rueda de prensa caben re señarse los elogios del presidente al papel desempeñado por Josep Tarradellas en el proceso de transición política (desmintiendo cualquier malentendido entre ambos), su insistencia en el carácter disciplinado y sacrificado de la institución militar, descartando la posibilidad de una involución política por vía castrense, y una larga y erudita exposición sobre los condicionantes de la economía internacional y de la crisis energética sobre la situación española. Los españoles deben en tender solidariamente -vino a decir el presidente- que deben aplazarse reivindicaciones económicas por mor de la crisis que estamos atravesando y que es consustancial a todo el occidente europeo.

Durante cerca de dos horas, el presidente informó, «fuera de circuito», a los periodistas sobre relaciones internas de su partido y su Gobierno, acerca de recientes sucesos terroristas y sobre algunos aspectos muy concretos de nuestras relaciones exteriores.

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